FOTO: Jared C. Tilton/Getty Images for NASCAR Media

Ni una pandemia de alcance global es capaz de impedir la generación de noticias inverosímiles en el automovilismo.

Copa NASCAR realizó ayer domingo su tercera ronda del Pro Invitational Series, con 30 de sus estrellas compitiendo desde sus casas, con el simulador iRacing, en equipamiento profesional.

Pese a que la industria está detenida, el rubro tecnológico y patrocinadores relacionados con el aspecto físico de los atletas, tratan de aprovechar esta situación extraordinaria para obtener la mayor exposición posible e incluso contratar a algunos pilotos como portavoces de marca.

La cita en cuestión fue el óvalo corto de Bristol, donde se anticipaba bastante caos e incidentes reiterados. De hecho, se registraron 12 banderas amarillas y Daniel Suárez y Kyle Larson fueron descalificados por un incidente.

Pero lo que se robó los reflectores fue una situación que tuvo a «Bubba» Wallace como protagonista, ya que por la actitud que mostró en su participación corta, perdió un patrocinador.

Blue-Emu, marca que elabora productos que protegen las articulaciones musculares y afecciones de la piel mediante remedios de aceite, se asoció con el integrante de Richard Petty Motorsports a partir de esta semana.

Todo parecía ir por un camino bueno. Wallace terminó 8º en su heat calificatorio y estaba sobreviviendo a las neutralizaciones del arranque de la carrera estelar, hasta la 16º vuelta, cuando protagonizó un incidente con Clint Bowyer.

«Fui Bubbeado», expresó Bowyer, en referencia a los contactos que intercambió con el auto icónico No. 43.

Acto seguido, Wallace expresó, en su transmisión personal en Twitch: «Es por eso que no me tomo esta tontería en serio. Adios. ¡Que les vaya bien!». Así fue como abandonó la competencia.

A una parte del público pudo parecerle graciosa esta situación; después de todo, son eventos de exhibición que distraen un poco a la gente de la realidad.

Pero no fue el caso de Ben Blessing, el Vicepresidente Ejecutivo de Blue-Emu, quien no tardó en retirarle su patrocinio a Wallace.

«¿Se imaginan si él hiciera eso en la vida real en una pista?», declaró el directivo a The Action Network.

Blue-Emu ha respaldado al legendario Petty desde hace muchos años; en las cinco últimas temporadas, fue auspiciante principal del equipo en 10 eventos de la vida real, incluyendo una con Wallace como titular, la de la visita a Bristol en agosto.

La suspensión de carreras para este mes por la crisis sanitaria creó un área de oportunidad para exponer su producto y tener a portavoces populares en el gremio; sin embargo, a Blessing le disgustó la forma campante en la que Wallace dejó la carrera.

Por esta razón, el CM de la marca no escatimó en responderle al piloto, a través de Twitter, que «ellos patrocinaban pilotos, no a desertores».

“Pensamos que esto, en el fondo, era una suerte para nosotros. Pero luego descubres que no estás patrocinando a un piloto de NASCAR, estás patrocinando a alguien como mi hijo de 13 años que rompió su controlador al jugar un juego donde él construye casas», explicó.

Hasta la mañana del lunes, ni Wallace ni el equipo de Petty han emitido alguna postura o disculpa por lo que pasó.

El originario de Mobile, Alabama, se ha caracterizado por ser muy abierto en temas diversos; incluso, el año pasado, admitió públicamente que desde hace años enfrenta cuadros de depresión.

Sin duda, este tipo de situaciones, o la intención del Dr. Helmut Marko de infectar a los pilotos de Red Bull con el COVID-19, mantienen el periodo de crisis bastante activo y, en cierta forma, entretenido.