Kalle Rovanpera (FOTO: Jaanus Ree/Red Bull Content Pool)

Škoda no tendrá un equipo oficial en el WRC 2 en 2020, aunque sus esfuerzos se concentrarán en respaldar a sus equipos privados y a la generación nueva de pilotos.

La constructora checa logró 30 títulos mundiales alrededor del mundo el año pasado, incluyendo el de la segunda división del Mundial de la FIA con Kalle Rovanperä, el de Pierre-Louis Loubet en WRC 2 para privados y el Rally NACAM con el mexicano Ricardo Triviño.

Sin embargo, Rovanperä ascenderá a la clase estelar con Toyota y Jan Kopecky regresará a su natal República Checa. Además, la categorías menores se simplificarán, con el WRC 2 Pro llamándose WRC 2 (para marcas oficiales) y el WRC 2 rebautizándose a WRC 3 (para privados).

En la primera, es casi un hecho que no habrá alineaciones de fábrica de tiempo completo, al tiempo que Ford, Citroën (por el cierre de su programa oficial) y Volkswagen (transición a autos eléctricos) mantendrán disponibles sus modelos R5 a quien esté interesado.

Por ello, el enfoque del programa de deporte motor de Škoda radicará en sus clientes, así como en el desarrollo de pilotos jóvenes.

«Hemos vendido más de 300 autos y los clientes esperan un nivel de servicio especial, de repuestos y consultas para la instalación, la reconstrucción de la transmisión y los motores», explicó Michal Hrabánek, Director del equipo.

«Vender esta cantidad de autos conlleva un gran compromiso y no quisiéramos decepcionar a nuestros clientes. Después de uno de nuestros años más exitosos en el WRC, no hay razón para volver y demostrar que el auto es confiable y competitivo nuevamente; sabemos que el equipo es capaz de ganar».

«Ahora es la oportunidad de los equipos (privados) de ganar el campeonato con nuestro apoyo. Pero no retrocedemos, nos quedamos en el campeonato y buscamos algunas mejoras con el Fabia R5, vendrán».

Desde su debut en 2015, el modelo Fabia R5 ganó el campeonato WRC 2 en cada año que compitió, catapultando a Esapekka Lappi, Pontus Tidemand y Rovanperä, monarcas en 2016, ’17 y ’19, subir a coches de rally mundial. 

Uno de los candidatos a recibir apoyo de fábrica es Oliver Solberg, quien no tiene planes anunciados más allá del Rally de Montecarlo de este mes, en el que competirá con un Volkswagen Polo R5.