Tal y como lo prometió, aunque sin los mismos reflectores que Ferrari – quien les provee de la unidad de potencia – aunque con la ilusión intacta por regresar a la pelea por la media tabla, el equipo sueco presentó su nuevo monoplaza con el que espera borrar los malos recuerdos de una temporada 2014 en la que no pudo sumar ni un solo punto.

Eric Gandelin, jefe de diseño de Sauber comentó que el trabajo se enfocó en tres aspectos: el desempeño en las curvas lentas, en la reducción de peso (a pesar de que las nuevas regulaciones aumentaron el peso mínimo de 691 a 702 kg. pero les proporcionó un amplio rango de maniobra al momento de distribuirlo en el auto) y en la estabilidad al momento de frenar, situaciones con las que batallaron a lo largo de la temporada pasada y que no fueron resueltas por completo.

“La suspensión delantera ha cambiado un poco y se ha hecho un gran esfuerzo por mejorar la dirección de acuerdo a la retroalimentación de los pilotos. Los pompones laterales son más esbeltos, lo que beneficia la eficiencia aerodinámica, a pesar de los altos requerimientos para refrigerar la nueva unidad de potencia”.

«El auto que rodará en Jerez tendrá algunos componentes del C33, los que serán paulatinamente reemplazadas por partes nuevas. Utilizaremos el tiempo que resta para el inicio de temporada en Australia para asegurarnos de ser tan competitivos como sea posible”. Concluyó Gandelin.
Foto: Sauber F1 Team.