El equipo Williams de Fórmula Uno también colocó a parte de su personal bajo licencia forzada y redujo el salario de sus pilotos.
Días después de que McLaren anunciara sus medidas de austeridad, la casa de Grove anunció este lunes que, por la situación del COVID-19, una cantidad de empleados sin especificar estarán en permiso temporal hasta el final de mayo.
Asimismo, George Russell y Nicholas Latifi, junto con gerentes principales, redujeron sus sueldos un 20 por ciento a partir del 1 de abril pasado.
«Estas decisiones no se han tomado a la ligera», se explica en un comunicado. «Sin embargo, nuestro objetivo es proteger los trabajos de nuestro personal en Grove y garantizar que puedan volver a trabajar de tiempo completo cuando la situación lo permita».
Al ser el peor equipo de la parrilla en los dos últimos Mundiales, las ganancias de Williams de enero a junio de 2019 fueron de 51.7 millones de libras, con una pérdida de EBITDA (Ganancias antes de intereses, impuestos, depreciación y amortización) de 18.8 millones.
En diciembre, la compañía puso a la venta Williams Advanced Engineering, su brazo tecnológico que recaudaba gran parte de sus ingresos.
Por la crisis sanitaria del coronavirus, su Directora Adjunta, Claire Williams, enfatizó que su prioridad era «salvaguardar su negocio», ya que no está claro el impacto de la posposición de eventos en las escuadras.
Racing Point también confirmó la aplicación de licencias en algunos empleados, mientras sus pilotos Sergio Pérez y Lance Stroll tomando un recorte voluntario de sueldo.
Durante el fin de semana, el Jefe de McLaren, Zak Brown, advirtió que la F1 podría perder hasta cuatro equipos ante la crisis, si ésta no se maneja «de la manera correcta».