Rumbo a la última fecha del Mundial de Rallies, Toyota se encuentra en una situación inversa, en comparación con 2018.
En esa temporada ocasión, la organización con sede en Finlandia se agenció su primer título de constructores desde 1999, aunque Sébastien Ogier (M-Sport) se quedó con el trofeo de pilotos.
Este año, el campeón nuevo Ött Tänak llegará a la ronda final del calendario con la misión de ayudar a Toyota a ganar la copa de equipos por segundo año consecutivo.
Para ello, deben erradicar un déficit de 18 puntos (de 43 posibles) ante Hyundai, operación para la que el estonio manejará en 2020. Con su corona asegurada, Tanak aspira a hacer lo que tenga en sus manos, mientras disfruta la última aparición al volante del Yaris WRC.
«Después de toda la presión que tuvimos en España, será agradable ir a Australia sintiéndonos mucho más relajados», afirmó. «Como equipo, hemos logrado mucho en los últimos dos años y tenemos la oportunidad de intentar ganar otro título juntos».
«Me gusta el Rally Australia pero puede ser muy desafiante. Con todos los árboles y las sombras, puede ser difícil ver hacia dónde va el camino, por lo que debes centrarte en sus notas».
El año pasado, Jari-Matti Latvala logró la victoria en Coffs Harbour y Esapekka Lappi llegó en cuarto. Tänak llegó a luchar por el triunfo, hasta que se accidentó en la penúltima etapa.
Para Tommi Makinen, haber logrado el título de pilotos fue algo fantástico, pero el enfoque cambia rápidamente al último pendiente restante en el año.
«Esta vez somos los perseguidores, pero de alguna manera nos resulta bastante sencillo; solo tenemos que presionar para obtener los puntos máximos y ver qué pasa», comentó el director del programa.
«Nuestro auto es fuerte en el tipo de caminos que enfrentamos en Australia. El año pasado, Jari-Matti (Latvala) se llevó la victoria y Ott estuvo allí hasta tarde. Sé que es un rally en el que Kris (Meeke) también ha tenido éxito en el pasado. Así que nos sentimos seguros de nuestras posibilidades».
Además de ser la despedida de Tänak, Australia podría ser la última aparición de Latvala y/o Meeke con el escuadrón, al mantenerse en negociaciones con Makinen y Toyota, pero sin alcanzar un punto concreto hasta ahora.
Kalle Rovanpera, campeón en WRC 2 Pro, es el único con contrato para el año siguiente, en un momento en el que se rumoran una gran cantidad de alternativas para el Mundial próximo, desde el mismo Ogier hasta Elfyn Evans. Este último visitó la sede de Jyvaskyla hace algunos días.
Hyundai también busca su primer título de constructores desde su regreso al WRC en 2014. Para la última fecha, tendrá en sus autos a Thierry Neuville, Dani Sordo y Craig Breen, este último como reemplazo de último minuto de Andreas Mikkelsen.