FOTO: Joe Portlock/Williams F1

El año de Sergey Sirotkin en la Fórmula 1 se puede describir de la forma en la que transcurrió su último Gran Premio con Williams.

El ruso concluyó en 15º y última posición entre los que completaron el recorrido en la jornada del domingo, luego de que todo el fin de semana tuviera un rendimiento aún más inferior que su coequipero Lance Stroll, pese a superarlo en la sesión de calificación.

«Fue una carrera dolorosa, un turno tan doloroso», describió. «Intentaba hacer lo mejor para calmarme tan rápido como fuera posible pero mientras otros autos se detenían en fosos y salían detrás mío, intentaba luchar, proteger y enfriar el coche al mismo tiempo, y fue un desastre».

«No lo disfruté. Ha sido una carrera muy, muy dolorosa. Realmente quería disfrutarle, es tan doloroso terminar la temporada así».

Sirotkin inició el fin de semana con muchos sentimientos encontrados, ya que la fábrica de Grove le notificó su salida la noche antes de la presentación de Robert Kubica como su reemplazo aunque su patrocinador, el programa de desarrollo SMP Racing, le indicó su situación una semana antes.

Aunque se dijo «muy triste» porque no estará en la parrilla en 2019, se siente satisfecho de haber hecho un trabajo decente bajo circunstancias difíciles.

«(Por) la forma en la que empezamos, cómo reaccionamos a eso, y cómo hemos estado como un equipo unido, estoy feliz», comentó.

SMP aseguró que el graduado de la GP2, quien solo sumó un punto con la décima posición conseguida en Italia, apoyará el siguiente paso de Sirotkin, enfatizando en que ellos dejaban la escudería al quedar «desagradablemente sorprendidos por el nivel pobre de rendimiento desde el inicio de temporada y el bajo grado de desarrollo durante la misma».