Las posibilidades de que el límite presupuestario de los equipos de Fórmula Uno se reduzca aún más tomó fuerza, luego de que la FIA anunciara un cambio en sus procesos de toma de decisiones.
A partir de ahora, en ciertas circunstancias, la Federación aceptará la aprobación de la mayoría de los equipos, y no de un voto unánime, para cambiar las reglas.
Esto ocurre en medio de la tensión entre Ferrari y sus rivales sobre la propuesta de fijar el tope de presupuesto en menos de 175 millones de dólares el año próximo.
Hasta ahora, el Código Deportivo Internacional de F1 indicaba que cualquier cambio para 2021 que se realizara en esta etapa requería el apoyo de todos los equipos.
Pero ante el impacto de la pandemia de coronavirus y los temores sobre le golpe financiero sobre los competidores, la FIA se dio el poder de intervenir y hacer cambios solo con el apoyo de la mayoría, si tales ajustes «salvaguardan» el campeonato.
«En circunstancias excepcionales, y si la FIA considera que el cambio en cuestión es esencial para salvaguardar el Campeonato, copa, trofeo, desafío o serie en cuestión, el acuerdo de la mayoría de los Competidores debidamente inscritos será suficiente», anunció este viernes.
LAS POSTURAS
Ferrari está en contra de reducir el límite del presupuesto por debajo de 145 millones de dólares, porque no quiere despedir a su personal ni participar en otras categorías para poder enviarlos a éstas.
Sin embargo, McLaren criticó su postura, al temer que si no se toman medidas rápidas para reducir el tope a solo 100 millones, se arriesga el futuro de equipos varios.
Al hablar del asunto la noche de ayer jueves, el Jefe Ejecutivo de McLaren, Zak Brown, comentó que esperaba que la FIA actuara y no permitiera que la voz «solitaria» de Ferrari cambiara lo que la mayoría de los equipos están buscando.
«En última instancia, es algo que la FIA y la Fórmula 1 (debe) respaldar, pero no creo que puedan frenar si hay suficiente alineación y veto, si lo desean, sobre lo que se propone», dijo.
Brown también acusó a Ferrari de estar «en negación» sobre la necesidad de que el deporte tome medidas rápidas para asegurar su futuro.
La clave ahora será si la FIA considera o no que la situación actual es excepcional y si el hecho de no reducir el límite presupuestario para proteger a los equipos arriesgaría el futuro de F1.
Este último asunto fue algo que Brown sintió que estaba en juego, mientras hablaba en respuesta a los comentarios del director del equipo Ferrari, Mattia Binotto.
«Estamos en una situación en la que, si la Fórmula 1 sigue sus hábitos viejos, todos corremos un riesgo extremo para el futuro de la F1», explicó.
«Y creo que si pensamos con anticipación y nos adaptamos a los tiempos, no solo podemos sobrevivir a lo que está sucediendo en este momento, sino que, en última instancia, creo que el deporte puede prosperar y todos ganamos».
«Estoy a favor de un buen debate saludable. Pero creo que los comentarios que se me presentan no se apilan, se contradicen y no reflejan con precisión lo que creo que es la realidad».