Sébastien Ogier impuso su ritmo en el primer día de actividades del Tour de Corse, cuarta fecha del Mundial de Rallies de 2018.

El tetracampeón reinante sigue ejerciendo la superioridad que no encontraba en las primeras fechas del año, pero que desde México fue más evidente; en esta ocasión implantó diferencia desde el primer momento, al completar la etapa La Porta-Valle di Rostino con casi 10 segundos de ventaja ante sus rivales más cercanos. Ni él se esperaba tal actuación, ya que no ha habido grandes mejoras en su modelo Fiesta.

“Me sorprendió mi tiempo”, dijo. “No fue perfecto. Tuve el mismo tipo de sobreviraje que sufrí en la primera cita, en Montecarlo”,

El integrante de Ford/M-Sport quedó con tres de las cuatro etapas disputadas, lo que le valió una diferencia de 33.6 segundos sobre el Hyundai de Thierry Neuville, ganador defensor del evento, quien inició el día con problemas de frenos y agarre, pero que fue solucionando conforme transcurrieron las pruebas.

Kris Meeke, quien encabezó el Shakedown y no cometió errores durante la jornada, finalizó en tercer sitio, aunque con una desventaja de 38.7 segundos ante Ogier, en tanto que el mejor Toyota correspondió a Ött Tanak, con 44.2 segundos de déficit tras cubrir 125 km. de recorrido.

El viernes atestiguó el abandono de Sébastien Loeb, quien se salió del camino en el segundo tramo (Piedigriggio-Pont de Castirla), mientras era escolta de Loeb, dejando a su Citroën C3 atascado en una zanja. El francés retomará la actividad mañana sábado, pero en la categoría Rally 2.

En WRC 2, Jan Kopecky lideró el clasificador, colocando a su Skoda solo 20.8 segundos delante de Yoann Bonato, quien maneja la versión cliente del nuevo Citröen R5; Stéphane Lefebvre, representante de la fábrica francesa, también sufrió con el sistema de frenado del nuevo auto, recuperó tiempo para finalizar en 4° lugar, a 1:10 m. del líder,

El español Nil Solans, campeón del WRC3 y el JWRC del año pasado, se retiró por una falla en su Fiesta R5.

Mañana sábado se completarán seis tramos, incluyendo la de Cagnano-Pino-Canari, de 35.6 kilómetros de extensión.