El piloto finlandés dejó de lado la mala racha que lo había privado de puntuar en las tres últimas fechas del Campeonato Mundial de Rally, y soportó la presión impuesta por Sebastien Ogier en las últimas etapas para no sólo ganar esta quinta fecha del calendario 2015, sino que además, el resultado le permitió dar un salto importante en la tabla general al pasar del noveno al quinto sitio.
Jari-Matti tomó el liderato después de la cuarta etapa, al verse beneficiado de que – por reglamento – los líderes de la clasificación general abrieron camino dejando la pista en las mejores condiciones para que el finlandés, a pesar de haber cometido algunos errores, no perdiera la punta.
El segundo puesto fue para Ogier, quien se repuso de un mal inicio que lo relegó hasta el séptimo puesto. El francés avanzó de manera constante a través de las etapas para recuperar tiempo y ponerse segundo en el décimo tercer tramo, pero ya era demasiado tarde para llevarse la victoria.
Ogier terminó frustrado por abrir los tramos y cuando llegó al final del “Power Stage” – donde se llevó los tres puntos – subió al techo del auto y declaró que el mejor no había ganado en esta ocasión. Poco después se retractó por lo dicho al reconocer que Latvala no puso las reglas y se tuvo que conformar con el segundo sitio.
Andreas Mikkelsen corrió por primera vez en el año con un Polo R WRC del 2015, dando muestra de su talento al terminar en el tercer sitio después de sostener una dura batalla con Kris Meeke. De esta manera el noruego cerró una tremenda demostración de poderío de Volkswagen al lograr el 1-2-3.
La siguiente cita de la serie se llevará a cabo en Italia, del 11 al 14 de junio.
Foto: Volkswagen Motorsport