Una junta de más de cinco horas al inicio de la pandemia de la COVID-19 ayudó a Hyundai a defender el Título de Constructores del WRC de manera exitosa.
En una temporada tan corta como ninguna otra que se haya enfrentado en los últimos tiempos, el equipo tuvo que profundizar más que nunca para cumplir sus objetivos de pretemporada, en especial durante el paro del torneo.
Al final, la casa coreana, con sede en Alzenau, Alemania, aseguró la corona con diferencia de cinco puntos sobre sus rival más cercano, Toyota, habiendo ganado tres eventos de un calendario acortado de siete fechas.
«En mi opinión, la razón por la que nos hemos coronado Campeones del Mundo por segunda vez se reduce a nuestro informe posterior al Rally México», afirmó Andrea Adamo, Director del equipo.
«Tuvimos una discusión propia después de ese evento donde pusimos sobre la mesa todas las cosas que no habían funcionado. Duró unas cinco horas».
«Trazamos claramente las formas y áreas en las que teníamos que mejorar, cómo podíamos dar a las tripulaciones el coche que necesitaban y la dirección que teníamos que tomar».
«Fue un intercambio abierto y franco que llevó al trabajo intenso que hicimos en el encierro y desde nuestras oficinas centrales para dar pasos importantes hacia adelante. Regresamos a Estonia con un 1-2 que mostró los resultados de ese esfuerzo».
Thierry Neuville y Nicolas Gilsoul salieron victoriosos en la inauguración de la temporada en MonteCarlo, el cual tuvo contrastes porque los recién llegados, Ött Tänak y Martin Järveoja, sufrieron un accidente muy aparatoso.
Las rondas siguientes en Suecia y México fueron eventos condensados, este último debido a la pandemia que cesaría la acción durante seis meses, aunque la pareja de estonios consiguió sus primeros podios para el equipo con segundos lugares.
Cuando la temporada se reanudó en Estonia en septiembre, las intenciones eran claras. Un 1-2, liderado por los locales Tänak y Järveoja, escoltados por Craig Breen y Paul Nagle, confirmó el progreso de la agrupación.
Al reducir la brecha en el Campeonato de Constructores en condiciones difíciles, fue otro 1-2 en Cerdeña, con Dani Sordo y Carlos del Barrio como vencedores, que los vio construir la ventaja que contaría al final.
Pese a que el cierre de temporada en Monza vio la consagración de Sébastien Ogier, los podios de Tänak y Sordo, junto con los puntos de Etapa de Poder, fueron suficientes para amarrar el título.
Además de sus tres victorias con tres tripulaciones diferentes, Hyundai sumó un total de 11 podios, incluidos dos resultados de 1-2.
Desde su regreso al WRC en 2014, ha totalizado 17 triunfos. Por si fuera poco, Jari Huttunen se consagró en WRC3.
«Lo que todos vieron externamente fue un equipo reagrupándose y presionando duro para volver a encarrilar su campeonato», comentó Adamo. «Debajo de la superficie, fue un período desafiante con un efecto personal muy real».
«Tuve que gestionar el proceso de hacer que la gente, mi gente, volviera a sus países de origen, manteniendo a todos tranquilos. Tuvimos muchas discusiones internas para mantener las cosas en marcha, para estar seguros y para asegurarnos de que poníamos a nuestros colegas en primer lugar».
«Fue, y sigue siendo, una situación desgarradora. Ha sido una montaña rusa, pero esperamos que estos rallies recientes hayan dado a los fanáticos algún tipo de gozo».
Para 2021, Hyundai contará con Tänak-Järveoja y Neuville-Gilsoul como titulares de tiempo completo, mientras Sordo y Breen compartirán un tercer auto. Sébastien Loeb, quien finalizó 3º en Turquía, no volverá a la organización.
Oliver Solberg, hijo del ex campeón noruego Petter, y Ole Christian Veiby representarán a la compañía en WRC2.