Esta década se acaba y fue completamente predecible con los campeones de Fórmula Uno y MotoGP –las series premier de cuatro y dos ruedas respectivamente–, repitiendo títulos al por mayor, lo cual a muchos les aburre, pero a NUESTRO EDITOR le da oportunidad de meterse a los números a escudriñar las minucias que marcan la diferencia entre un campeón, un multicampeón y una leyenda, encontrando muchos argumentos para ir pensando que ambos rondan la categoría máxima de logros, o sea que se están volviendo legendarios.
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