En su cuarto año manejando monoplazas, Mick Schumacher alcanzó los titulares principales y logró el primer campeonato de su trayectoria, el cual ya lo tiene en la antesala rumbo a la Fórmula 1.
El alemán disputó por segunda ocasión el Campeonato de Fórmula 3 Europea, en la cual pasó de ser un novato sin experiencia al piloto que sumó más victorias, pese a un arranque difícil en un entorno competitivo, pero que supo controlar y superar conforme transcurrieron las competencias.
«Creo que mi autoestima tuvo que ser revitalizada, luego de mi arranque pobre de temporada», dijo. «Y eso va sin decir que los éxitos como los podios y victorias fueron útiles en el camino para hacerlo. En general aprendí mucho este año. Maduré como piloto de carreras y en el carácter».
Y es que el integrante de PREMA Theodore Racing esperó hasta la sexta carrera del torneo para subir al podio por primera vez, luego de que un accidente en la primera calificación en las calles de Pau, Francia, condenara su resultado y su nivel de rendimiento fuera inferior al de contendientes como Dan Ticktum, Enaam Ahmed y Zhou Guan Yu.
Llegaron los fines de semana en Norisring y Zandvoort, donde la consistencia y el trabajo en pista le permitieron sumar puntos, pero fue en Spa-Francorchamps donde comenzó a forjar su camino hacia la corona, al lograr su primera PP y su primera victoria, eventos que considera que fueron los más importantes de 2018.
Desde entonces, Schumacher fue intocable. Subió al podio en ocho de las siguientes 10 carreras, nunca bajó del quinto lugar e hiló cinco triunfos consecutivos, incluyendo las tres en Nürburgring, con lo que superó a Ticktum y se convirtió en favorito a alzar la corona.
El manejo de la presión y la inteligencia al manejar en la parte final del año, así como el trabajo en equipo, le abrieron la puerta para asegurar el primer lugar absoluto en Hockenheim, a falta de una competencia. En el proceso, le dio a Mercedes-Benz su victoria 500 en categorías de Fórmula E, lo que le dio aun más reconocimiento dentro de la constructora alemana.
«La atención se enfocó en el joven justo desde el inicio, y él estuvo bajo mucha presión», comentó Toto Wolff. «No es fácil lidiar con todo eso, especialmente si la temporada no tiene el mejor de los inicios, como en este caso».
«Su rendimiento en la segunda mitad de temporada fue, por ello, más impresionante. Él ha mostrado que él tiene lo que se necesita y que él puede convertirse en uno de los grandes en nuestro deporte».
En 2019, Mick afrontará la Fórmula 2 con PREMA Theodore, aunque no será una contienda sencilla, ya que tendrá como rivales a veteranos como Nyck De Vries, así como pilotos con afiliación a la Fórmula 1 como Sergio Sette Camara y Nicholas Latifi. ¿Seguirá los pasos de su padre en el Gran Circo en el corto plazo?