Cyril Abiteboul cumplió la apuesta que acordó con Daniel Ricciardo el año pasado y se tatuó.
El ex director de la escudería Renault (hoy Alpine) acordó tatuarse en caso de que el piloto australiano obtuviera un podio durante su etapa de dos años con la casa de Enstone, lo cual pasó en los Grandes Premios de Eifel en Nürburgring y de Emilia Romaña en Imola de 2020.
Aunque pasó más de un año, finalmente ambos personajes se reunieron en Reino Unido para honrar su trato, en el que se tatuaron un tejón mielero, que es el símbolo por excelencia de Ricciardo.
Ricciardo ha tenido apuestas favorables en tiempo reciente. Al llegar a McLaren, acordó con Zak Brown que, en el caso de subir al podio, manejaría un Chevrolet Monte Carlo 1984 de su héroe de la infancia, Dale Earnhardt I. No sólo lo cumplió, sino que además ganó el Gran Premio italiano de septiembre pasado, por lo que el trato se hizo en Austin.
Abiteboul dejó el equipo de Enstone a principios de año.