III GP DE MÉXICO
25 de octubre de 1964
PRIMER CAMPEONATO HECHO EN MÉXICO
Al GP de México, fecha final de la campaña, llegaron tres pilotos con posibilidades campeoniles: Jim Clark (Lotus), Graham Hill (BRM) y John Surtees (Ferrari), pero en ese año sólo contaban los seis mejores resultados de las 10 fechas pactadas. Las combinaciones posibles para obtener el título eran:
Hill era el líder con 41 puntos, pero sólo le contaban 39 (dos triunfos, tres segundos y un cuarto) y necesitaba acabar del tercero en adelante para mejorar su cifra.
Surtees tenía 34 (dos triunfos, dos segundos y un tercero) y necesitaba un segundo sitio cuando menos para llegar a 40 y rebasar a Hill si este no quedaba en el podio.
Clark tenía 30 puntos (tres triunfos y un cuarto) por lo que si ganaba podía igualar los 39 de Hill y vencer en el criterio de desempate por mayor cantidad de victorias, si Graham no quedaba en el podio y Surtees no era segundo.
El campeonato de constructores también tenía muchas permutaciones con Ferrari en 43 puntos, BRM en 42 y Lotus en 37. Esencialmente el que quedaba al frente se coronaba por equipos.
En las prácticas y calificación el “escocés volador” fue el mejor en su Lotus y obtuvo la PP con un récord de pista en 1m57.24s, delante de Dan Gurney (Brabham) con Surtees en cuarto y Hill en sexto. Pedro Rodríguez fue noveno en un tercer Ferrari y Moisés Solana fue decimocuarto en el tercer Lotus.
Desde la salida Clark se fue al frente seguido por Gurney y circularon sin presión la mayoría de las 65 vueltas pactadas. Hill se mantenía batallando con Lorenzo Bandini (Ferrari) por el tercero y Surtees era quinto en un Ferrari 158, menos potente, pero más confiable que el 1512 de Bandini.
En un intento de rebase Bandini tocó a Hill en la Horquilla y le dobló los escapes al BRM, quien perdió dos vueltas en los fosos y el campeonato. El escocés de Lotus domino hasta la vuelta 64, de 65, cuando su auto se vació de aceite y expiró al pasar la meta faltando poco menos de cinco kilómetros. Gurney quedó en punta, con Bandini y Surtees detrás. Si “Big John” quedaba segundo, superaba a Hill en puntos y se coronaba, por lo que todo el equipo Ferrari se brincó las pacas (no había riel separador) a la pista frente a los fosos para avisarle al italiano que dejará pasar al inglés. Órdenes de equipo muy obvias y John quedó segundo para coronarse con 40 puntos contra 39 de Hill y 32 de Clark, quien quedó quinto.
VI GP DE MÉXICO
22 de octubre de 1967
HULME VENCE A SU JEFE
Ese año el campeonato era de 11 fechas y contaban cinco de los seis mejores resultados de las carreras de inicio y cuatro de los cinco mejores de las carreras finales. Lotus usó el motor Cosworth acoplado al chasis Tipo 49 y dominó, pero la falta de confiabilidad ya le había dado el título de constructores a Brabham por segundo año consecutivo. El campeonato de pilotos lo disputaban los dos pilotos de la escuadra australiana:
El campeón de 1966 Jack Brabham tenía 42 puntos pero necesitaba ganar para llegar a 49 y que Hulme no quedara arriba del quinto sitio pues el criterio de desempate favorecía al campeón.
Su escudero Denny Hulme tenía 47 puntos, pero lo que sumara le aportaba, pues no había cumplido su cuota de resultados y con quedar cuarto aseguraba el título.
Para no variar, Jim Clark hizo maravillas con su Lotus-Ford y ganó la posición de privilegio en 1m47.56s (récord), acompañado por Chris Amon (Ferrari) en primera fila. Moisés Solana, en el tercer Lotus, calificó noveno y Pedro Rodríguez, piloto oficial de Cooper, fue decimotercero, pues regresaba a la acción tras perderse tres GPs por un accidente de F2, donde se rompió la pierna.
En la arrancada Clark quemó el embrague y se retrasó hasta que éste volvió a “morder”. Entonces inició su remontada para ganar obteniendo la vuelta rápida y liderando 63 de las 65 vueltas. Atrás de él iba Brabham, perdiendo más de un segundo por vuelta y otro medio minuto atrás iba Hulme en tercero, simplemente aguantando para conseguir el título. Así terminaron y el título de pilotos se fue a Nueva Zelanda por primera, y única, vez. Pedro quedó sexto y tuvieron que sacarlo cargando del auto pues estaba exhausto, mientras Moisés abandonó en el giro 13 por rotura de suspensión. Clark, el único con tres victorias en México, no regresaría más, pues una carrera de F2 en Hockenheim cobraría su vida en abril siguiente.
VII GP DE MÉXICO
3 de noviembre de 1968
OTRA DEFINICIÓN Y CASI PODIO PARA MÉXICO
Como en 1967, el campeonato era de 11 fechas y contaban cinco de los seis mejores resultados de las carreras de inicio y cuatro de los cinco mejores de las carreras finales. La definición del mundial fue en México, una semana después del final de los XIX Juegos Olímpicos. Se dio entre Jackie Stewart de Matra International (o sea, con motor Ford), el campeón Denny Hulme, quien se mudó a McLaren con el título, y Graham Hill quien había levantado a Lotus tras la muerte de Jim Clark al inicio de la primavera, y la escuadra inglesa ya tenía el título de constructores amarrado.
Hill lideraba con 39 puntos, seguido por Stewart con 36 y Hulme con 33 y todos podían sumar cualquier resultado en México. Las combinaciones ganadoras principales eran:
Hulme necesitaba ganar y que Hill quedara cuarto o menos.
Hill necesitaba un podio mientras Stewart no ganara.
Stewart necesitaba ganar o quedar segundo con Hulme tercero y Hill cuarto, pues el criterio de desempate por triunfos le favorecía.
La PP fue ganada por el suizo Jo Siffert en un Lotus privado del equipo de Rob Walker en 1m45.22s, seguido por Amon (Ferrari) con Hill y Hulme en segunda fila y Stewart en séptimo. Moisés Solana corrió el tercer Lotus desde el sitio 11 y en esa sexta fila lo acompañó Pedro Rodríguez, piloto oficial de BRM.
Hill lideró al inicio, pero Stewart tomó la punta en el quinto giro y el inglés la recuperó en el noveno para conservarla, mientras Hulme se retiraba en la vuelta 10. Stewart se retrasó y Hill dejó al frente a Siffert, pero éste también se retrasó y Hill lideró desde el giro 25 para ganar carrera y título, mientras el escocés caía en la clasificación hasta quedar séptimo, sin puntos.
La mejor lucha en pista se dio entre el Lotus oficial de Jack Oliver, coequipero de Hill, y el BRM de Pedro, quienes batallaron por el podio hasta el final. Incluso Hill los dejó pasar porque Pedro iba ganado en la vuelta 64 y así le dio oportunidad a Oliver de cortarse el aire, rebasar en el giro final y quitarle el podio por 44 centésimas de segundo. Es lo más cerca que ha quedado un nacional del podio en el GP de México.
XIX GP DE MÉXICO
29 de octubre de 2017
EL TETRACAMPONATO DE LEWIS Y MERCEDES
El Autódromo Hermanos Rodríguez recibió la fecha 18 del campeonato con Lewis Hamilton liderando por 66 puntos y Mercedes ya campeón de constructores por cuarto año consecutivo. Sin embargo la escuadra plateada sufrió con la puesta a punto en la altura de la capital mexicana. En la Calificación fue superada por Sebastian Vettel, quien logró la PP con un récord de pista y por Max Verstappen, quienes ocuparon la primera fila. Lewis Hamilton y Valtteri Botas estuvieron en la segunda, sobre sus Mercedes W-08H.
El título lo disputaban Hamilton y Vettel y la ventaja de Lewis con 75 puntos por disputar dejaba estas opciones para que lograr su cuarta corona y empatara a su rival:
Si Vettel ganaba, Lewis necesitaba llegar quinto para asegurar el campeonato con una ventaja de 51 puntos restando 50 por disputar.
Si Vettel quedaba segundo, Lewis podía llegar noveno con lo cual aseguraba el título pues quedaría 50 puntos arriba con 50 por disputar, pero con mayor cantidad de triunfos que su rival al final del año, lo cual es el primer criterio de desempate.
Si Vettel quedaba tercero o más abajo, el título era automáticamente para el británico pues el resultado dejaría al alemán con más de 50 puntos de desventaja restando sólo 50 en disputa.
La carrera se definió en la primera curva –la Ese Moisés Solana– pues Vettel salió bien y tomó la líena interna. Max se fue por el centro y Lewis tomó la exterior para ir todos a la derecha en la frenada. En la segunda parte, hacia la izquierda, Max aguantó a Vettel y tomó la parte interior, se tocaron y el alemán sufrió daños en el alerón delantero, se abrió dejando un hueco que Lewis aprovechó. En la tercera porción de la Ese al doblar a la derecha Lewis pisó tierra, se salió ligeramente y cuando Vettel vio el hueco aceleró, Lewis recuperó el auto y Vettel le dio con el alerón a la llanta trasera derecha del Mercedes y la pinchó.
Max se escapó hacia la victoria, mientras Vettel se fue a los fosos seguido por Lewis, mucho más lento el inglés, y ambos salieron a remontar. Tras 71 giros Vettel llegó cuarto atrás de su coequipero Kimi Raikkonen y Lewis cruzó la meta en noveno, después de una batalla con Fernando Alonso, lo cual le dio el título y la gloria.
