F E R N A N D O T O R N E L LO • @ F1Tornello
Estamos en un momento muy especial del crecimiento en la F1. Por un lado, grandes marcas tradicionales, como Aston Martin, Lamborghini y Alfa Romeo, coquetean con sumarse o regresar a la categoría. Por el otro, las que están, Mercedes y Ferrari, acusadas de querer “matar” a la F1, palabras que puso en su boca nada menos que Bernie Ecclestone, el hombre que hizo crecer de la nada a la categoría reina.
Más allá del anuncio de Renault, que regresa con la compra del equipo Lotus, aquellas dos, la alemana y la italiana más famosa, son cuestionadas por no aceptar que los equipos chicos sean ayudados, ya sea con cambios en el reglamento, con limitación de costos o con el permiso para que entre un motorista más accesible en cuanto a precios.
La tarea que enfrentan los dirigentes no es sencilla, son muchos los frentes abiertos y las batallas que vienen serán dolorosas. Precisan mejorar la competitividad en pista, la economía de los equipos, el reparto de utilidades, abaratar los costos de motores, contener el salario de los pilotos, conformar a Pirelli, su proveedor de neumáticos, y renegociar contratos con organizadores, circuitos y canales de TV. No será fácil.
“Nos equivocamos con el reglamento en 2014”. Jean Todt
El mercado está en ebullición. Para mejorar el espectáculo deberán escuchar los pedidos del público. Ya no se toleran carreras en las que la principal incógnita es saber quién llegará primero a la curva inicial, si Hamilton o Rosberg, y después de ello el resultado está casi anunciado. Para lograr mayor interés habrá que retocar el reglamento, sobre todo tras el reconocimiento tardío que hizo el presidente de FIA, Jean Todt, quien dijo: “Nos equivocamos con el reglamento en 2014”. Por lo menos ya aceptó el error que todos comentamos ya en la primera carrera, en Australia de aquel año.
La economía de los equipos no es un tema menor. Lotus, Sauber, Force India, Toro Rosso y Marussia sufrieron en 2015. Algunos más, como Lotus y Sauber, otros menos, como Toro Rosso. Algún grande como McLaren perdió patrocinios, todavía aguanta pero no se sabe cuánto resistirá.
Ferrari es el equipo que recibe mayor cantidad de dinero del FOM, gracias a un bono especial por participación
El reparto de utilidades que realiza FOM tiene a Ferrari como el principal beneficiado. Los números del año 2014 son contundentes. Ferrari terminó cuarto entre los equipos pero fue el que mayor tajada recibió, unos 180 millones de euros, contra 144 de RBR y 131 del campeón Mercedes. Ésto porque Ferrari tiene un bono único por participar; es claro, la F1 sin Ferrari no sería F1, pero a los demás no les gusta esa distribución.
Un ahorro sería reducir el salario de los pilotos, que cada vez manejan menos los autos. El trabajo mayor lo hacen los ingenieros, en tanto el reglamento lo permite. Los grandes campeones como Hamilton y Alonso cobran unos 100 mil dólares por día, más de 30 millones por año. Vettel percibe unos 80 mil y Raikkonen alrededor de 50 mil. Si quieren seguir cobrando esas cifras, merecerían que haya modificaciones reglamentarias y técnicas que los hagan manejar más que ahora, sin todas esas ayudas electrónicas.
“Ellos (Mercedes y Ferrari) están matando a la F1” Bernie Ecclestone
Los motores siguen siendo caros. Ecclestone intentó incorporar a un constructor estándar, más barato, seguramente recordando las viejas y gloriosas épocas de Cosworth, pero Mercedes y Ferrari se opusieron. Ellos quieren que se empareje para arriba y que los pequeños equipos consigan los recursos para enfrentarlos de igual a igual. Es una pelea con final abierto ya que no ven el riesgo de que corran solos, sin rivales que participen del juego. Ecclestone los enfrentó fiel a su estilo, con frases como, “Ellos están matando a la F1” o “la F1 es una mugre”.
Entre las mudanzas que debería hacer la categoría, será clave que las reglas sean claras, que el público las pueda entender. Hoy tenemos motores con seis componentes, penalizaciones por cambios de cada uno de ellos una vez excedidos los permitidos, pero todo empeoró. Por una nueva decisión de FIA, ahora se sumó el juego de elección de gomas. Pirelli se vio obligada a anunciar varios meses antes las gomas de las primeras carreras de 2016, los equipos deben optar por dos juegos obligatorios y uno más por carrera. Tendrán llantas superblandas para la Calificación, mismas que algunos deberán devolver a los comisarios y otros no. En fin, casi inentendible.
Y finalmente, otra área a solucionar es el costo que se cobra a los organizadores y canales de TV. Para 2016 hay varias bajas. En Inglaterra se retira la BBC, en España ya no habrá televisación por canales abiertos, sólo por cable y así se siguen reflejando problemas varios. Los ingresos de FOM por derechos de TV suman 31% de las entradas anuales totales.
En cuanto a los organizadores, ya casi no queda espacio para que empresas privadas puedan pagar los costos sin ayuda de los gobiernos, salvo alguna excepción. Hoy, Singapur, Abu Dabi, Bahrein, entre otros, utilizan la difusión de F1 para posicionar a sus países en el mundo, a un costo inabordable por cualquier empresa comercial. Circuitos construidos hace pocos años no resistieron a los montos que debían pagar y quedaron fuera del calendario, rumbo a la oscuridad total, con desmantelamiento y pérdida
millonaria de instalaciones, como Corea del Sur, India, Turquía y Valencia. Este último caso es emblemático, ya que la comuna enfrentó gastos por 200 millones de euros, de los cuales debe unos 100 y está devolviendo un préstamo de otros 60 millones. Toda la operación naufragó y hoy el circuito es pura desolación. Los alcaldes Francisco Camps, quien negoció la carrera en 2007, y Rita Barberá son cuestionados por organismos de control, acusados de despilfarro del dinero público. Triste final para una carrera anunciada con bombos y platillos.
Si usted se tomó el tiempo para leer esta nota larga sabrá que F1 enfrenta desafíos brutales. Dependerá de sus líderes, Ecclestone y Todt, si consigue superarlos. El público así lo espera, a pesar de todo.