El motor T5 es la versión de gasolina más potente del nuevo elenco Drive-E de cuatro cilindros de Volvo, y da 242 caballos y 2.0 litros. Lo primero que impresiona es lo quieto y refinado que parece el motor cuando esperamos en la línea de arranque en Goddowood, y luego sorprende también la dosis de aceleración que llega cuando el comisario nos da la luz verde. El auto puede alcanzar 100 kph en 6.3s, más rápido que un 1.8TFSI Audi A3 quattro o un BMW 118i Sport, y ciertamente se siente rápido.
La transmisión automática de ocho velocidades –la única opción disponible con el T5– hace un buen trabajo para seleccionar el cambio correcto, y si eliges el modo Sport hay cambios de marcha notablemente más rápidos. Nos gustaría ver incluida la opción de paletas montadas al volante, pero los cambios parecen lo suficientemente bien espaciados como para asegurar un progreso terso. Incluso a revoluciones altas el potente motor de cuatro cilindros conserva sus formas correctas, y según las cifras de Volvo, también puede ser económico. La cifra citada de economía combinada de combustible es de 20.4 kpl, junto a emisiones de CO2 de 137 g/km.
El V40 se siente como un auto muy premium cuando se empareja con el nuevo motor T5, e incluso después de una pequeña corrida, sabemos que Volvo tiene a un ganador. Y hay más noticias, también, porque a largo plazo Volvo quiere reemplazar su elenco completo de motores foráneos con unidades Drive-E hechas en casa.