Bate a Daniel por el triunfo, pero Goeters llega tercero y mantiene la punta.

La sexta fecha de NASCAR México fue el escaparate perfecto para que el piloto de Escudería TELMEX, Antonio Pérez, demostrara que tiene las manos y el hambre de triunfo para pelear por el campeonato, en una carrera que dominó con manejo e inteligencia, y en la que pudo contener los embates del joven protagonista de la temporada: Daniel Suárez del TELCEL Racing.

La PP la obtuvo el hidrocálido Rogelio López con 24.490”, 23 milésimas más rápido que Pérez, siendo tercero el líder del campeonato, Jorge Goeters, con José Luis Ramírez y el novato de 16 años, Rubén García M. completando los primeros cinco.

En la carrera, Rogelio era el favorito local, pero un problema tempranero lo relegó. Toño se mantenía luchando con Ramírez y Goeters, siempre entre los tres primeros lugares, aunque la carrera se vio interrumpida por siete banderas amarillas en sus 171 giros, la primera pasando 20 vueltas del inicio.

Las amarillas compactaron el pelotón y favorecieron a Suárez, quien venía haciendo una gran remontada desde el lugar 21 de largada, y para el último tercio de la contienda estaba colocado en el tercer lugar. Siguiendo a Toño y Jorge.

Sin embargo vino otra amarilla en la cual Rubén Rovelo, coequipero de Toño en la Escudería TELMEX, pinchó un neumático y luego fue penalizado por adelantarse en la rearrancada, por lo que perdió una vuelta, pero peleaba a la velocidad de los punteros y quedó tercero en el pelotón, detrás de Toño y Daniel sirviendo de escudo para que la carrera se definiera entre ellos, pues Goeters no lo podía pasar.

Las últimas vueltas fueron realmente lo que valió toda la carrera. La lucha entre Toño y Daniel fue muy cerrada, con los autos tocándose, pero siempre de forma limpia, buscando la posición y defendiéndola con todo. Dos pilotos jóvenes, llanta con llanta en una carrera emocionante que se definió para el tapatío por cuatro décimas al caer la bandera
de cuadros.