Para los amantes de los autos de carreras de la década de los 50, L’Epée 1839 presenta el modelo Time Fast D8 que homenajea dichos vehículos en su máximo esplendor.
Fundada hace 175 años, la relojera suiza L’Epée 1839 trabajó de la mano con Georg Foster, un diseñador joven que plasmó de manera exquisita su gusto por el automovilismo en una pieza hecha completamente a mano.
El diseño elegante y los acabados irreprochables son detalles que atrapan la mirada. A primera instancia nos recuerda a los Ferrari, Maserati o Talbot-Lago de aquella época. El capó del motor se estira hacia delante y posee las ruedas de radios, la rejilla delantera típica de los años 50 y la posición del conductor ubicada más hacia atrás.
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El cronógrafo complejo, hecho principalmente de aluminio, acoge un motor, o, mejor dicho, un calibre interno con reserva de marcha para 8 días –de ahí su nombre– que se mueve a una velocidad de 18,000 alternancias. Para darle cuerda basta con deslizarlo hacia atrás como coche de fricción de juguete.
Éste muestra la hora y los minutos a modo de dorsal de carreras, ofreciendo una lectura sencilla en la parte lateral del chasis. Del otro lado tiene una placa circular con el nombre de la relojera.
Asimismo, a la altura de la posición del piloto tiene una cápsula de cristal brillante que simula un casco. Frente a él se encuentra el volante de tres radios, con el cual se puede ajustar la hora.
Mide 38 cm de largo, 16 de ancho y 12 de alto, y pesa 4.7 kg. Time Fast D8 es una edición limitada, pues sólo existen 100 unidades de cada color de carrocería que conmemora a grandes escuderías: rojo, azul, verde y blanco con rayas azules.
Cada uno tiene un costo de $30,000 USD ($650,415 MXN aprox.)
