Leimer gana el título en su cuarta campaña
El campeonato 2013 demostró que GP2 se ha convertido en el refugio de pilotos veteranos que con base en la experiencia van ganando carreras y esperan su turno para coronarse. El campeón de 2010, Pastor Maldonado, lo fue en su cuarta campaña; el de 2011, Romain Grosjean, también en la cuarta; el de 2012, Davide Valsecchi, en la quinta; y el nuevo campeón 2013, el suizo Fabio Leimer, lo hace en su cuarto año en GP2 ¿Era esa la idea cuando fue creada? Aparentemente no y los equipos de F1 están volteando la vista hacia la serie rival, la Fórmula Renault 3.5 para buscar a los estrellas que en uno o dos años pueden ser campeones y subir a la máxima categoría no tras muchos años en las divisiones de promoción.
La campaña no fue tanto que la ganara Leimer, sino que la perdiera Stefano Coletti, quien amasó 120 puntos en las primeras ocho carreras y luego sumó 15 en las siguientes 14 rondas. Lo fueron alcanzando, pero todavía peleaba en la penúltima fecha doble el título. Similar, pero menos drástico fue el caso del brasileño Felipe Nasr, quien iba segundo y se fue quedando para acabar cuarto, justo encima de Coletti, ambos rebasados al final por James Calado. Leimer fue lo opuesto, ganó de inicio, luego tuvo un bache en España y Mónaco y después la constancia le dio el título pese a la carga final de Sam Bird, quien estaba desempleado al inicio de la campaña y Campeones GP2 terminó de subcampeón en su tercera temporada en GP2 (en 2012 corrió la FR3.5 así que es igual, un veterano), además de darle el título a Russian Time, escuadra debutante que compró el asiento de iSport, y empató en puntos con Carlin Motorsport (273), pero ganó el desempate con cinco triunfos contra dos de los ingleses.
2013 mostró que la fórmula de un monoplaza con chasis y motor idéntico para los 26 pilotos participantes no es una en la que sobresalga el talento natural, sino la experiencia y el kilometraje recorrido en estos autos. Algo deben hacer si quieren que GP2 siga como escalera viable a la F1.