El equipo ex campeón debe empezar de cero para recuperar su condición ganadora antes del cambio de nombre. Por Edd Straw.

El cambio de nombre del equipo Renault a Lotus, aprobado por la Comisión de F1 la semana pasada, es un paso clave en la apuesta del equipo para restablecerse como grande.

Aunque hay interrogantes respecto al futuro a largo plazo, ya que todavía no tiene un acuerdo firmado con Renault para cuando llegue la siguiente generación de motores de 1.6 litros V6 turbocargados en 2013, el equipo tiene el potencial de recuperar el ímpetu perdido el año pasado.

Aunque Renault acabará quinto en el campeonato de constructores por segunda campaña consecutiva, sólo ha marcado 72 puntos comparado con los 143 que tenía la temporada pasada en estas fechas.

Después de lograr terceros sitios consecutivos en las primeras dos fechas del año con Vitaly Petrov en Australia y Nick Heidfeld en Malasia, que son el 42% de los puntos logrados por Renault en 2011, el equipo sólo ha conseguido un sitio posterior entre los seis primeros.

Al haber desechado efectivamente esta campaña, el enfoque es revivir al equipo en 2012. El director, Eric Boullier, dijo a AUTOSPORT: “Ha sido muy frustrante y desafiante, pero también ha sido una buena experiencia porque tuvimos que repensar la forma en que hacemos las cosas. Esto definitivamente nos ha hecho mejores. Ha sido una experiencia dura, pero buena”.

“Este equipo ha sido capaz de desarrollar un auto innovador y andar entre los tres mejores equipos en cuanto a desempeño en las primeras carreras. Estoy seguro con lo que veo que la motivación en el equipo le permitirá producir el mismo nivel de desempeño a lo largo del año próximo”.

EL ERROR DEL ESCAPE

El director técnico de Renault, James Allison, admitió que el innovador escape frontal estancó a Renault esta campaña. Tras invertir ampliamente en desarrollar el concepto usando CFD, el equipo de diseño de Renault encontró una configuración que funcionó bien y era tan bueno o incluso superaba su escape ortodoxo. Pero el concepto inicial estaba cerca de su potencial máximo de desempeño, dejando poco espacio para mejorar. Cuando los equipos rivales trabajaron más sus escapes convencionales estilo Red Bull, Renault fue relegado.

El auto fue poco competitivo en las pistas lentas, como Singapur, porque el modelado en túnel de viento de desempeño del escape de 60-100 kph no fue preciso.

Renault decidió en contra de cambiar a un sistema más convencional éste año; el auto de 2012 no tendrá ese concepto, y Boullier cree que el equipo resurgirá: “Es difícil culpar al diseño del escape porque es bueno tener ingenieros capaces de ser creativos e innovadores. De inicio era muy veloz, pero los otros equipos adoptaron el sistema de escape trasero y lo desarrollaron más rápido que nosotros”.

PILOTOS CONTEMPLADOS

La pérdida de Robert Kubica en pretemporada retrasó significativamente a Renault. Las dudas actuales acerca de su capacidad para estar listo a tiempo para el inicio de la temporada son una nube en Enstone. Parece que su retorno será por etapas. Éste es sólo uno de los factores que pueden estorbar a Renault cuando renazca como Lotus el año próximo. Pero el potencial de reemerger como un constante contendiente a los podios sigue ahí, si se tiene el auto adecuado.