El Gran Premio de Mónaco tiene sus sesiones de entrenamiento los días Jueves y Sábado previos a la carrera. La ausencia de actividades en Viernes se debe a que originalmente el GP se llevaba a cabo durante el fin de semana de «l´Ascension», una festividad religiosa Cristiana que marca el día en que Jesus ascendió al cielo después de su resurección. Este día se celebra como un día feriado en Mónaco y desde la primer edición en 1929, ningún auto podía circular durante el circuito ese día.
Actualmente no es más que una tradición y la jornada libre da la oportunidad a que por la mañana se celebren carreras de las categorías de soporte, mientras que por la tarde las calles que forman la pista se abren al público.