Chevrolet acapara los seis podios en África y Muller enfila rumbo al «tetra».
Lastrados al máximo tras los triunfos en Monza y Valencia, se llegó a pensar que el circuito callejero Moulay El Hassan podría no ser tan favorable a los Chevrolet Cruze en la tercera ronda del Mundial de Turismos, pues la pista es estrecha con bordos altos que afectan mucho la suspensión. La realidad fue otra y quizás le dio escalofríos a los promotores, pues el dominio de los autos azules fue, una vez más, absoluto, no soltaron ni un podio siquiera y los BMW de tracción trasera sufrieron más en las calles marroquíes.
La calificación fue un duelo entre los Cruze de Alain Menú y Rob Huff por la Posición de Privilegio, mientras el campeón Yvan Muller era relegado por Tom Coronel en un BMW de la escuadra ROAL, pues nunca encontró una vuelta libre para mejorar su tiempo, aunque la diferencia entre los primeros cuatro fue de exactamente tres décimas.
La arrancada de la Carrera 1 fue bastante normal, Menú tomo la punta y Huff lo siguió sin los dramas usuales. Pero Coronel se durmió y lo pasaron Muller y el SEAT del adolescente Pepe Oriola y luego fue tocado por el novato Alex MacDowall y se trompeó. Y atrás de ellos chocaron un Ford y un BMW con lo que salió el auto insignia hasta que se restauró el orden.
En la rearrancada Huff miró por dentro, pero volvió a alinearse atrás de Menu en la primera curva y ahí se acabó la diversión. Los pilotos de Chevy explicarían que querían conservar sus autos para la Carrera 2 y como nadie los presionó, se dedicaron a dominar en fila sin intentar heroísmo. Eso permitió a Oriola acabar cuarto en el SEAT León e imponer la Vuelta Rápida, el más joven en la historia del WTCC en lograrlo.
Para la Carrera 2, con la parrilla invertida, la PP fue para James Nash en el Focus que había sido eliminado en los incidentes iniciales de la Carrera 1. Los seguían varios BMW con los Chevys listos para atacar desde los sitios 7 (Muller), 9 (Huff) y 10 (Menu).
Nash disfrutó sus cinco vueltas al frente, pero en la sexta lo pasaron los tres Cruzes encabezados por el tricampeón Muller y los autos azules circularon en fila nunca separados por más de un segundo durante las cinco vueltas restantes. Coronel y D’Aste, quien habían arrancado 8 y 11, respectivamente, contribuyeron a entretener al público remontando y presionando a Nash hasta que este se pasó en la segunda chicana en el noveno giro y lo rebasaron para relegarlo al sexto sitio.
Así, con 24 puntos de ventaja para Muller y 107 para Chevrolet, se encaminan en dos semanas a Eslovaquia para la cuarta ronda.