Pato O’Ward no se salvó del caos en Nashville y con ello, sus posibilidades de título en 2022 se redujeron casi por completo.
El mexicano calificó en quinto lugar para la carrera de este domingo, realizada en el circuito callejero alrededor del estadio de los Titanes de Tennessee de la NFL pero que se retrasó alrededor de una hora y media por una tormenta eléctrica. Al comenzar, se mantuvo entre los diez primeros puestos hasta que salió una bandera amarilla en la 24º de las 80 vueltas pactadas, debido a un trompo de Helio Castroneves.
A partir de aquí, el desarrollo se distorsionó por completo, ya que los pilotos que ingresaron a fosos antes de la neutralización pasaron al frente y el regiomontano reinició en el décima posición.
Pero uno de los que se desfasó fue Jimmie Johnson, quien amontonó al pelotón al llegar a la zona más lenta de la pista y los contactos fueron inevitables. Will Power tuvo que frenar al máximo y O’Ward hizo lo propio, propinando un golpe al australiano.
Graham Rahal trató de frenar al instante pero también pegó en la parte trasera del monoplaza del mexicano, dañando su transmisión. Otros pilotos, como Jack Harvey, Callum Ilott y el mismo Scott Dixon también estuvieron en la colisión.
«El Chevrolet Arrow McLaren SP No. 5 estuvo fuerte todo el fin de semana; desafortunadamente, no tuvimos mucha suerte en la carrera», dijo.
«Vi que un auto disminuía la velocidad, así que tuve que pisar los frenos. Lo que Graham Rahal me hizo, iba a hacerlo yo con Will Power».
«Lamentablemente, solo hay una forma de verlo y fue un golpe lo suficientemente grande como para romper algo en la caja de cambios. Simplemente no pude ponerlo en marcha. Desafortunadamente, ese fue nuestro día».
Seven total cars involved in this incident.@GrahamRahal, @PatricioOWard and @Dalton_Kellett are now OUT.
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— NTT INDYCAR SERIES (@IndyCar) August 7, 2022
O’Ward ya no pudo retomar la marcha y selló su tercer abandono del año; se le acreditó el 24º lugar.
En cambio, Dixon recibió un golpe de Dalton Kellett y tuvo que hacer tres detenciones en fosos para que le repararan una suspensión y parte del tren trasero de su auto, pero no perdió la vuelta y esperó a que la suerte le sonriera más adelante en la carrera.
Esto finalmente pasó cuando Rahal y Rinus VeeKay chocaron después de que entrara en fosos, provocando un encadenamiento en el que todos los supervivientes al caos se metieron a su último cambio de llantas.
Tras esperar a que Josef Newgarden realizara su detención, Dixon lideró las ultimas quince vueltas y contuvo al grupo en dos reinicios, llegando 0.1067s adelante de Scott McLaughlin, quien remontó de 15º en el sprint de 16 vueltas.
La carrera, que tuvo nueve neutralizaciones para 36 vueltas, pasará a la historia porque Dixon llego a 53 victorias en su trayectoria, desempatando con Mario Andretti para apoderarse de la segunda posición en el ranking histórico.
McLaughlin y Álex Palou completaron el podio, por delante de Alexander Rossi y Colton Herta, quienes en su momento estuvieron con un giro de desventaja.
Power también quedó con desperfectos en su máquina tras la carambola y llegó 11º, último en la vuelta del líder; pese a mantener el liderato general, el australiano supera por seis puntos a Dixon, por doce a Marcus Ericsson (quien abandonó), por 28 a Newgarden (sexto en el resultado) y por 33 a Palou. El mexicano O’Ward cayó a séptimo en la clasificación, con déficit de 59 unidades.
La antepenúltima fecha de la IndyCar será el 20 de agosto en el óvalo de Gateway.