Las flechas de plata dieron una muestra más de su tremendo desempeño al terminar al frente de la tabla de tiempos de la primera prueba libre con la que abrió su actividad en pista el GP de Hungría, la cual lamentablemente se destacó por el accidente del que salió ileso el piloto mexicano luego de que terminara volcado su monoplaza.
La sesión dio inicio con Nico Rosberg y Lewis Hamilton intercambiando la punta, hasta que el inglés logró parar el cronómetro en 1:25.291 tiempo que se mantuvo al frente hasta los últimos minutos de la prueba. En los siete minutos finales, los dos W06 Híbridos venían con marcas muy similares, Hamilton fue el primero en cruzar la línea de meta marcando el 1:25.141 que lo dejó en el primer puesto, relegando a su coequipero al segundo lugar por tan sólo una décima.
Kimi Raikkönen terminó tercero pero se mantuvo cerca de los mercedes, superando a Rosberg en el segundo sitio por algunos minutos, pero al final la diferencia de su Ferrari fue de casi siete décimas respecto al tiempo de Hamilton. Daniel Ricciardo y Daniil Kvyat demostraron su buena forma en trazados técnicos al finalizar la sesión en el cuarto y el quinto puesto respectivamente, a nueve décimas de la punta.
Los pilotos sufrieron de la falta de agarre por la pista “verde”, por lo que perdían la parte trasera del auto, eso fue lo que inició el accidente de Sergio “Checo” Pérez, quien reconoció tomar en un mal ángulo una curva. Fue entonces que la suspensión trasera cedió, lo que le quitó el control del VJM08 al mexicano, llevándolo hasta la barrera de contención y volcando posteriormente. De manera muy afortunada Sergio salió por sus propios medios del auto.
Así apareció la primera bandera roja para recuperar el auto de “Checo”, mientras que el alerón delantero que se desprendió y voló en pedazos del Ferrari de Raikkönen, la hizo ondear una vez más a cuatro minutos del final, lo que marcó el término de la sesión.