INDY ES LA META
José Armida Escudero viene de una familia con inclinación automovilística y su abuelo fue concesionario de autos de marcas clásicas en la primera mitad del siglo XX. Desde chico empezó a correr karts y con el tiempo se convirtió en campeón nacional de la Fórmula Mundial, una de las pocas clases que tenían cierto respeto y proyección dentro de la multiplicidad de reglas y categorías únicas regionales existentes en el kartismo nacional. Pasó luego a tripular monoplazas y se volvió campeón nacional de la F. Vee, a la vez que empezaba a correr en la Barber Pro estadounidense, en la que quedó tercero en la serie invernal 2012-13 y novato del año.
Josele Garza, el piloto que abrió el camino a CART (ahora parte de IndyCar) para los mexicanos, se convirtió en su manager y José empezó a pensar en Indy como meta, pues hace mucho que no hay mexicanos en la categoría más importante de monoplazas de Norteamérica. Tuvo algunas participaciones en series como la F2000 y la Formula Speed 2.0 en 2013, pero los planes no funcionaron en 2014 tras un inicio prometedor en la F. Mazda y fue hasta inicios de este año que pudo firmar con el Motor Speedway Resort (MSR), un circuito privado situado en Houston, que lo patrocinará un par de años como su embajador itinerante para aumentar su presencia entre el público aficionado al automovilismo. La idea es que después de dos años llegue el momento de brincar al IndyCar y correr la Indy 500, que es la meta inicial. Pero el reloj está corriendo.
- Es el piloto mexicano que mejor colocado ha quedado en Barber en la historia
- Jorge aspira a ser un piloto completo que igual corra monoplazas que autos sport o GTs
