FOTO: Doug Mathews/INDYCAR

Incluso Fernando Alonso muestra preocupación por el riesgo de no calificar a la edición 103 de las «500 Millas de Indianápolis».

Tras el accidente que protagonizó el miércoles, el español y su equipo McLaren han trabajado a marchas forzadas para ponerse a velocidad y no correr el riesgo de quedar eliminado de la competencia de la semana próxima; sin embargo, dependerá de un auto veloz y que las condiciones sean favorables al momento de que intente meterse a la parrilla este fin de semana.

«Creo que es lo mismo para todos. Mañana, creo que el orden de calificación y cuándo harás tu salida será un factor grande si es un día caluroso», comentó este viernes. «Veremos cómo va mañana. Pero sí, no hay nada garantizado».

FORMATO DE CALIFICACIÓN

El sábado, de las 10 a las 16:50 hrs (Hora México), 30 de los 36 inscritos asegurarán su participación en la carrera, que solo tiene cupo para 33 casillas.

Cada piloto tendrá un intento de calificación asegurado, siendo el promedio de cuatro vueltas lanzadas su tiempo final; dependiendo del tiempo disponible, y si ellos lo deciden, tendrán oportunidad de mejorar sus tiempos.

Los lugares 10 a 30, es decir, las filas 4 a 10 (porque cada fila de salida de la Indy 500 se conforma de tres autos) quedarán fijos y ya no tendrán necesidad de salir a pista el domingo.

Quienes queden en las nueve primeras posiciones al concluir el sábado avanzarán al «Fast Nine Shootout», a realizarse el domingo, de 12:15 a 13:15 hrs (Tiempo de México) en el que batallarán por la PP mediante un solo intento de cronometrar cuatro vueltas lanzadas, mismas que también se promediarán.

Antes, de 11:15 a 12:15 hrs, los seis participantes que aún no tienen garantizada su participación en la carrera también saldrán una vez a pista, en la batalla por los puestos 31, 32 y 33.

A diferencia de los últimos años, en los que la lluvia limitó las acciones, se espera un sábado soleado y caluroso en el área de Indy, lo que significa que los pilotos lidiarán con una pista resbaladiza y el viento cambiante que, dada la longitud del óvalo (4.1 km), genera sensibilidad en los monoplazas.

Nadie, ni siquiera los poderosos equipos Penske, Ganassi y Andretti, tiene asegurada la presencia de sus autos respectivos en la competencia. Como se vio el año pasado, cuando James Hinchcliffe y Pippa Mann no lograron la velocidad necesaria, esta sesión está sujeta a cualquier tipo de sorpresas.

«Pato» volvió a pista este viernes (FOTO: Red Bull Racing)

En tanto, Patricio O’Ward también tiene como objetivo evadir los problemas y calificar a la carrera desde este sábado. Si bien el accidente que sufrió el jueves limitó su tiempo de prácticas, el regiomontano también muestra confianza de las posibilidades para ser el primer mexicano en tomar parte de la Indy 500 desde 2012.

«Quiero comenzar diciendo lo orgulloso que estoy del equipo Carlin por trabajar tan duro ayer, anoche y hasta esta mañana para que el No. 31 Carlin volviera a funcionar hoy», expresó. «Hicieron un gran trabajo y simplemente mantuvieron la cabeza fría y terminaron lo que se necesitaba hacer».

«Obviamente, ahora estamos un poco atrasados ​​con nuestro plan de ejecución con la cantidad de tiempo que perdimos ayer, pero diría que nos sentimos bastante bien con la forma en que terminamos la práctica hoy. Tenemos un día largo de calificación mañana, pero confío en el equipo que está detrás de mí para que podamos hacerlo».