FERRARI SIEMPRE SUPO MEDIR LAS NECESIDADES DE SU EQUIPO DE COMPETENCIA Y CUANDO FUE NECESARIO HACERLO DECIDIÓ CONSTRUIR SU PROPIA PISTA PARA MEJORAR SU DESEMPEÑO, COMO NUESTRO HISTORIADOR EN JEFE RELATA CON LA MINUCIOSIDAD USUAL
Ferrari y los equipos de la zona de la Emilia-Romagna italiana como Maserati, Stangüellini, Lamborghini y otros, siempre tuvieron a su disposición el aeroautódromo de la ciudad para probar sus autos. Era un aeródromo pequeño, de una pista central de 1.6 kilómetros, cuya torre de control servía para dirigir aviones y autos por igual. La pista era un cuadrado formado por los caminos perimetrales, pero antes de la cuarta curva se metía por la pista central, hacía una horquilla y regresaba hacia esa cuarta curva que era la de entrada a la recta de meta.
Se inauguró en 1950, después de la guerra, junto al campo militar en las afueras de la ciudad y fue sede de carreras de F1 y F2, principalmente el Gran Premio de Módena no puntuable. También lo sumaban como pista de pruebas los militares y siguió en uso hasta 1975 cuando se convirtió en un parque público, aunque la última carrera de F1 fue en 1961 y en ella corrió en una demostración previa Ricardo Rodríguez, en la que fue su primera competencia de la categoría máxima.
A Enzo Ferrari no le gustaba tener que compartir el autódromo con otras marcas, por lo que cuando recibió dinero de FIAT por un porcentaje accionario de Ferrari, tuvo la visión de buscar la forma de construir un circuito propio, algo impensable para un equipo de carreras en ese tiempo.
El terreno en Maranello era muy caro, pero justo al otro lado de la carreta en Fiorano había campos vastos vecinos a su fábrica y ahí compró el terreno para construir su pista… y una casita se construyó en la parte externa para que pudiera quedarse a dormir cuando las necesidades del negocio lo requieran.
La pista original era de 3 kilómetros, con curvas lentas, medias y veloces, y un ancho de 8 y medio metros a todo lo largo, pero su innovación principal era que tenía cámaras y sensores a todo lo largo para poder ver el auto en acción y saber cómo se comportaba en la pista, todo lo cual era perfecto para la F1, aunque se compró con el pretexto de que así mejorarían los autos de calle, para que FIAT no objetara. La pista tiene un puente para ser compacta y al final de la recta principal se hizo un círculo de derrapaje, para medir las fuerzas laterales y probar llantas. Posteriormente se añadió un sistema de irrigación para simular condiciones de lluvia.
La pista sufrió dos cambios en 43 años: una chicana en 1992, pues el circuito original no tenía una y era la tendencia para hacer más lentas las curvas; en 1996 se abrió la curva de final de la recta y se volvió una curva rápida, para poder medir mejor los efectos de las fuerzas G en alta velocidad, aunque ambos trazos se conservan. Por ello, el circuito más usado mide ahora 2,976.4 metros y el récord de pista lo tiene Michael Schumacher, 55.999 segundos, desde 2004.
