Homenaje a un ícono: Mercedes-Benz Museum
En su museo en Stuttgart, Mercedes Benz se da el lujo de presentar más de 1,500 objetos en exhibición además de 160 autos en una línea continua de tiempo que abarca más de 127 años de tradición, lujo y clase, o sea, todos los años desde que existe el automóvil. El museo es obra arquitectónica del despacho holandés UN Studio y está en contraesquina de la fábrica de la firma. Abrió sus puertas en 2006 y ha recibido más de medio millón de visitantes por año.
La experiencia del Museo Mercedes Benz comienza con subir los nueve niveles que tiene el edificio por medio de modernos elevadores colocados en el atrio cuyo techo es una estrella de tres picos. Una vez que se llega a la cima, el museo ofrece dos espirales que narran la historia del automóvil. La primera espiral muestra siete salas de “Leyendas” y la segunda espiral tiene cinco “Colecciones” expuestas. El visitante camina por medio de rampas que llevan entre una exhibición y otra, además de ser posible cambiar entre las Leyendas y las Colecciones en distintos puntos, ya que la arquitectura de los pisos fue pensada como la doble hélix del ADN.
En la espiral de las Leyendas se narra la historia de la marca dividida por épocas y temas, en orden cronológico. Una rampa muestra los hechos históricos y corporativos en la pared del museo (en la parte externa del interior) y es completada por la selección de autos representativos de cada Leyenda formando el centro y foco de cada sala. La espiral de las Colecciones está compuesta de salones adornados por 1,800 paneles de vidrio triangulares (todos distintos) con los autos que documentan el alcance y la diversidad de los vehículos Mercedes Benz a lo largo del mundo.
Los dos tours terminan en la curva peraltada que muestra el salón de las flechas plateadas: “Carreras y Récords”. Esta curva con peralte, gradualmente se vuelve un muro vertical donde los coches que han roto récords están montados. Aquí la arquitectura se asemeja a las pistas de carreras donde han brillado los Mercedes Benz.
En 2013 Mercedes Benz dedicó una de las salas de Colección a la Clase S. Esta exposición está vigente hasta noviembre 3 y presume los coches de la marca bajo la frase “La Clase S – siempre adelante de su tiempo”.
Su historia comenzó en 1904 y están presentes vehículos representativos de esta serie durante los años, así como el modelo más reciente. La exposición resalta el lujo, la comodidad, el diseño y la innovación que Mercedes Benz ha incorporado a lo largo de la historia, sus valores y distintivos que la marcan entre las firmas premium. Y en su desarrollo se aprecia la filosofía que los originó y los sigue encauzando: “crear continuamente productos radicalmente nuevos para avanzar el curso de la movilidad humana”.
El 29 de enero de 1866 es el día reconocido como del nacimiento del automóvil, por ser el día que Carl Benz recibe la patente para el primer coche del mundo. En el museo es posible visualizar los pioneros de la movilidad humana. En la tierra, en el agua y en el aire el hombre sería transportado con un motor ligero de cuatro tiempos (estos tres elementos formaron la inspiración para la estrella con tres picos). Después de estas primeras herramientas que utilizó el hombre para desplazarse, se muestran las innovaciones en tecnología, ergonomía y diseño que hoy son fundamentales.
Muchos de los autos expuestos en el museo representan una “era” que han marcado con su propia historia. Esto incluye el ‘alas de gaviota’ (1950s) o el 230 SL que es el primer auto deportivo con celda de pasajeros rígida y zona de absorción de impacto. Estos vehículos han simbolizado la innovación y marcado la pauta del progreso automotriz. O las flechas plateadas y su transportador, que han regido las pistas en diversas épocas.
La calidad del Museo Mercedes Benz es incomparable por lo que, aficionados y turistas casuales, es un lugar que no se pueden perder cuando visiten Stuttgart.