Por Carlos E. Jalife Villalón
La Carrera Panamericana está inscrita en el inconsciente colectivo nacional desde que el presidente Miguel Alemán dio el apoyo a su realización en 1950 para mostrar al mundo que éramos una nación avanzada y cumplíamos nuestros compromisos de tener lista la porción de la –nunca completada– Carretera Panamericana que iba desde Alaska hasta Tierra del Fuego.
Este libro de José Alfredo Hernández Padilla es muy didáctico, pues en sus cinco capítulos, además de una plétora de introducciones y prólogos, narra cada año de la Carrera (1950-1954) en formato de texto al inicio, fotos después y récords, etapas y resultados principales al final.
Sin embargo, tras el capítulo de 1954 hay una especie de apéndices que tratan de 1955 y la cancelación de la justa por el accidente de Le Mans, ampliamente documentado con fotos; más otro de Felice Bonetto, quien perdió la vida en 1953 en Silao y fue, probablemente, el más famoso de los que no sobrevivieron a la gran carrera en carreteras mexicanas; finalmente hay listas de inscritos de los cinco años y los resultados oficiales completos.
El libro es de fácil lectura, son unas 25 páginas de texto por capítulo a triple columna con letra ancha, pero sin puntos y parte. Casi todo el resto de las páginas son fotos ordenadas como en álbum de estampitas, aunque hay algunas a página completa –en forma apaisada, no vertical– y es todo en blanco y negro, excepto la portada que es una ilustración en color. En general un esfuerzo muy loable que vale la pena su costo simplemente por la cantidad de fotos que tiene, en las que virtualmente están retratados todo los participantes de la magna competencia de mediados del siglo pasado, cuyo espíritu se mantiene vivo gracias a la actual competencia que reincorporó en el colectivo nacional Eduardo León en 1988 y que se corre precisamente este mes, y que tiene planeado pernoctar incluso en el Zócalo, digo si lo permiten algunos de los múltiples grupos de desadaptados sociales que lo han secuestrado para usarlo como base de operaciones con la complacencia de nuestras autoridades en los tres niveles de gobierno.
El libro lo encuentran mandando un correo al autor a autocrossmexico@yahoo.fr. Es un excelente regalo para el aficionado que quiere conocer más de la carrera que nos puso en el calendario internacional del deporte motor y nos mantiene en él.