Max Verstappen dominó el Gran Premio de Australia de F1, que tuvo tres banderas rojas y un final polémico.
El neerlandés no pudo contener la ofensiva de la dupla de Mercedes en el arranque de la jornada de este domingo, al grado de que George Russell y Lewis Hamilton lo desplazaron al tercer lugar.
Russell lideró al grupo durante los siete primeros giros, pero un accidente de Alex Albon cambió la complexión de la competencia, cuando impactó la barrera de las Curvas 6 y 7; al dejar suciedad, el Auto de Seguridad apareció.
En ese momento, tanto el británico como Carlos Sainz fueron llamados a los fosos para cambio de neumáticos, pero ocurrió momentos antes de que saliera la bandera roja, ya que el golpe del tailandés dejó mucha suciedad en la zona. Esto le permitió a todos los pilotos cambiar llantas en la zona de fosos.
Con ello, Verstappen tuvo a Hamilton como su único rival al frente mientras Russell cayó a séptimo, por lo que tras la reanudación, en el 13˚ giro, el neerlandés rebasó a Lewis antes de llegar a la Curva 10 y no volvió a soltar la delantera.
A partir de ahí, la batalla se centró entre Hamilton y Fernando Alonso, quienes mantuvieron distancia corta en casi todo el recorrido, por lo que en principio se perfilaba para ser una prueba de conservación de neumáticos. Pese a que Russell quedó eliminado en la vuelta 18, Sainz se recuperó para ser parte de la persecución por el podio, con Pierre Gasly manteniendo distancias cortas.
Pero todo esto quedó en el olvido cuando, a cuatro vueltas de la bandera a cuadros, Kevin Magnussen golpeó la pared a la salida de la Curva 2, en una acción en la que su neumático se desprendió y el danés, al tener el rin y suspensión dañados, tuvo que detenerse metros más adelante. Esto generó una segunda bandera roja, lo que podía dar oportunidad a Hamilton para buscar la victoria en un sprint de dos giros.
Esto no sucedió, gracias a que la salida – también con formato de parado – de Verstappen fue sólida mientras el caos se desató: Sainz golpeó a Alonso y generó una reacción en cadena que vio a los dos pilotos de Alpine chocando entre ellos, a Logan Sargeant sacando del camino a Nyck de Vries y a Sergio Pérez y a Lance Stroll despistándose en situaciones aisladas.
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— FASTmag (@Fastmagmx) April 2, 2023
Una tercera suspensión de competencia se ordenó, pero al sólo quedar una vuelta en la distancia programada, FIA y su Dirección de Carrera instruyeron un reinicio lanzado con el orden previo al accidente, sin permitir adelantamientos.
Con esto, Verstappen aseguró su primera victoria en Australia y la 37˚ en F1, extendiendo su ventaja en el liderato general a quince puntos sobre Pérez, quien hasta antes del caos había ascendido a séptimo. El mexicano, quien arrancó en la zona de fosos, concluyó en quinto puesto, detrás de Hamilton, Alonso y Stroll.
Todos se beneficiaron de la sanción de cinco segundos que Sainz recibió por el contacto con Alonso y que, a su vez, promovió a Lando Norris a la sexta casilla, en su mejor resultado del año.
El alemán Nico Hulkenberg tuvo una gran competencia, protagonizando duelos con Norris y con Yuki Tsunoda, que lo vieron terminar séptimo, adelante del novato Oscar Piastri, de Guanyu Zhou y del japonés de AlphaTauri.
A Sainz se le acreditó la 12˚ ubicación, llegando detrás de Bottas.