La polémica en torno a Red Bull continúa durante este fin de semana en el Gran Premio de Estados Unidos de F1.
Casi dos semanas pasaron desde que la FIA anunciara que la escuadra de Milton Keynes infringió el límite de presupuesto del ejercicio 2021 (145 millones de dólares). La prensa europea apunta a que hubo un sobregasto de 1.8 millones, principalmente por situaciones de impuestos y catering que no se tenían planeados.
Trascendió el jueves que la Federación ofreció la primera alternativa para seguir el proceso: llegar a un acuerdo en el que Red Bull admita que no respetó el límite; en caso de rechazarla, la situación pasará a la Administración de Límite de Costos, instaurada a la par del reglamento financiero nuevo que entró en vigor el año pasado.
Pero desde el mismo jueves, los pilotos ya han sido más abiertos en sus opiniones sobre el tema, en especial tras la carta que Zak Brown redactó y que se filtró hace unos días.
Christian Horner respondió este sábado a la carta del jefe de McLaren en la conferencia de prensa de jefes de equipo, en la que ambos estuvieron presentes y en la que lamentó que a su agrupación se le acuse de “tramposa”.
«Es tremendamente decepcionante que un compañero competidor te acuse de hacer trampa, de actividad fraudulenta», dijo. «Es absolutamente impactante que otro competidor, sin los hechos, sin conocimiento de los detalles, pueda hacer ese tipo de acusación».
«Hemos estado en juicio debido a acusaciones públicas desde Singapur. La retórica de los tramposos, la retórica de que hemos tenido este enorme beneficio, los números que se han publicado en los medios están muy lejos de la realidad».
«Y el daño que le hace a la marca, a nuestros socios, a nuestros conductores, a nuestra fuerza laboral, en una era en la que prevalece la salud mental, estamos viendo problemas importantes dentro de nuestra fuerza laboral. Estamos recibiendo niños que están siendo intimidados en los patios de recreo que son hijos de los empleados, eso no es correcto a través de acusaciones ficticias de otros equipos».
«Y no puedes andar haciendo ese tipo de alegaciones sin ningún hecho o sustancia. Estamos absolutamente consternados por el comportamiento de algunos de nuestros competidores».
Como lo relataba @ojalife, la rueda de prensa de jefes de equipo de FIA fue relativamente tensa, al ser el caso de Red Bull y el límite de costos el tema principal.
Brown y Horner, presentes; Mattia Binotto estaba programado para asistir, pero no se sentía bien.
📸 Art Vega pic.twitter.com/4J9Lobyh1U
— FASTmag (@Fastmagmx) October 22, 2022
Horner, quien dijo que no recibió copia de la carta de Brown, explica que pese a ser un proceso nuevo, no hubo una retroalimentación cuando se entregó el papeleo provisional en marzo.
Además, insiste en que los que denominó “costos” relevantes están sujetos a interpretación, por lo que espera aclarar el asunto con FIA sin necesidad de algún acuerdo y sin necesidad de que tome meses.
«Absoluta y categóricamente, no sentimos que tuviéramos ninguna ventaja en 2021 o 2022 ó 2023 ó ’24, o algunos equipos incluso hablan de ’26, es totalmente ficticio», aseveró.
Aunque escudándose en que fue una postura general, Brown defendió la carta y reiteró su posición, apelando a la transparencia y justicia en el proceso y confiando en que la FIA tomará las medidas necesarias.
«Mi carta establecía que si un equipo gastaba más que el tope, obtendría una ventaja», dijo. «Y el tope es una regla, no diferente a las reglas técnicas. No vamos a opinar si lo hicieron o no. Mi carta fue (sobre que) si alguien tiene, estas son las cosas que deben abordarse».
«No mencioné a ningún equipo, fue una respuesta general ahora que estamos entrando en la era del límite de costos; alguien lo infringe, esto es lo que creemos que son las ramificaciones».
Valtteri Bottas y Carlos Sainz indicaron que debe haber sanciones ejemplares a fin de evitar este tipo de casos en el futuro; mientras tanto, Max Verstappen calificó de «hipócritas» las posturas, al ser una maniobra para terminar con la hegemonía de Red Bull.