La serie se muere por falta de autos y será absorbida por Grand Am en 2014.
La serie American Le Mans (ALMS) tuvo un pobre año intentando hacer una réplica de lo que la FIA ha construido con el Mundial de Resistencia (WEC).
La clase estelar, de prototipos LMP1 tuvo tres autos peleando el título y la falta de confiabilidad fue tal que hubo ocasiones en que los prototipos chicos, LMP2, los batieron, aunque también eran tres los que peleaban el título en esa clase. Y completaron el cuadro los LMPC, los chasises ORECA-03 que servían para que los pilotos caballeros se sintieran volantes reales.
Los LMP1 son infinitamente superiores, pero con Pickett Racing y su Honda Spyder manejado por los campeones Klaus Graf y Lucas Luhr compitiendo contra los Lola-Mazda coupés de Dyson Racing, la situación se volvió aburrida. Los germanos perdieron la apertura en las 12 Horas de Sebring, luego ganaron cinco seguidas y con podios y un triunfo más en Virginia les alcanzó para ganar el título.
En LMP2 el Level 5 puso dos Honda contra el Morgan-OAK de Conquest Racing. El mexicano Luis ’Chapulín’ Díaz manejaba uno cuando el dueño Scott Tucker lo dejaba, pues corría en ambos autos para sacar puntos para coronarse, lo que logró acompañado de Christophe Bouchut, superando al equipo de Eric Bachelart por bastante.
En LMPC se coronó el venezolano Alex Popow, con diversos copilotos. Muchos mexicanos corrieron en esa clase, Rudy Junco, Javier Echeverría, Pablo Sánchez y hasta Ricardo González y su hermano Roberto, siendo Rudy el mejor colocado, en cuarto sitio.
Los autos GT estuvieron un poco mejor, con parrillas más completas, casi una docena de autos complementados con los GTC, Porsches 911 con menos potencia que los de la clase GT. Los Corvette, Ferrari, Porsche y BMW se dieron con todo, pero el ganador final fue el auto estadounidense con Oliver Gavin y Tommy Milner en los controles, pese a su supuesta desventaja tecnológica. En GTC Cooper MacNeil obtuvo el título tras separarse de Leh Keen, quien fue segundo general.
Fueron 10 fechas sin muchas emociones y por algo 2013 será su último año.