Mercedes se anticipó a la nueva directiva de la FIA al traer su cuarto y último motor a Spa-Francorchamps el pasado fin de semana para poder quemar mayor cantidad de aceite que los demás equipos.
Un portavoz de la FIA dijo: «Si un motor [elemento ICE] se introduce en o después del fin de semana de carrera de Monza, su consumo de petróleo debe ser inferior a 0.9l / 100km cada vez que se utiliza. Si un motor [elemento ICE] se ha introducido en o antes del fin de semana de la carrera de Spa, su consumo de aceite debe ser inferior a 1.2l / 100km cada vez que se utiliza».
La decisión de Mercedes de introducir su motor final en Spa causó cierto malestar en Ferrari, porque el equipo italiano no esperaba que nadie trajera motores nuevos para ese Gran Premio. También significa que el equipo Maranello tendrá que ejecutar su nuevo motor, cuando llegue, en el límite de 0.9L.
El asunto de la quema de aceite se había convertido en un punto de debate en Bélgica, pero el jefe de Mercedes Toto Wolff dejó claro que contento hablaría con Ferrari sobre el asunto si algo les hacía sentir molestos.