El DBR1 es posiblemente el automóvil de carreras más importante de Aston Martin, fue el primero de cinco autos construidos en 1956 en una apuesta por ganar Le Mans. Era el equivalente al Ferrari 250 GTO y el Mercedes-Benz 300 SLR, y era el sueño de David Brown que en 1959 ganaría Le Mans.
El auto fue desarrollado por el jefe de diseño Ted Cutting e hizo su debut en Le Mans en 1956 conducido por Tony Brooks y Reg Parnell, pero se retiró después de más de 22 horas de carrera con fallas en el cabezal del motor.
Carroll Shelby, Roy Salvadori fueron los pilotos que cumplieron el sueño de David Brown en 1959. Stirling Moss y Jack Brabham también lo corrieron. Moss y Jack Fairman ganaron con él en Nürburgring. Ese triunfo jugó un papel importante en la victoria del Aston Martin en el Campeonato Mundial de Carreras (WSC) en 1959.
Fue usado más adelante por el Essex Racing Stable y corrió recientemente en Goodwood con Brian Redman al volante.
El DBR1 es el primer auto de su tipo ofrecido en una subasta pública, que fijaría un nuevo precio récord si supera los 21 millones 780 mil dólares pagados por el Jaguar D-Tipo XKD 501 de 1955 en la misma subasta del año pasado.