Thierry Neuville acabó inesperadamente con el liderato del Rally de Italia del WRC al completar la actividad de este sábado.
El belga inició con desventaja de 18 segundos ante Sébastien Ogier y Esapekka Lappi, quienes protagonizaron un duelo muy cerrado en condiciones cambiantes de clima desde el viernes e intercambiaron el liderato general al completar cada una de las etapas de hoy.
De hecho, el francés comenzó a alejarse del finlandés a partir de la SS11, quien manejó en modo conservador tras sufrir una pinchadura; mientras tanto, Neuville ganó tres de los primeros cuatro tramos y redujo la brecha ante su coequipero en Hyundai para la hora del almuerzo.
Pero el desastre para Ogier llegó en la SS13, el segundo paso por Couluna-Loelle, cuando pasó por el mismo estanque a velocidad y su auto quedó con potencial limitada, cediendo varios segundos ante sus rivales de Hyundai, quienes para ese momento tenían 10s de separación.
Llegó el segundo bucle por Erula-Tula, dos tramos más tarde, cuando en condiciones de lluvia, Ogier se despistó y no logró retomar la marcha. Neuville capitalizó ante el hecho de que Lappi redujo la velocidad para evitar problemas en la zona del accidente y tomó la delantera, estableciendo una distancia mayor a 23s.
Un triunfo soberbio en la especial final dejó a ambos pilotos separados en 36.4s., con Kalle Rovanperä heredando la tercera posición, con déficit cercano a dos minutos.
Takamoto Katsuta, Ött Tänak y Pierre-Louis Loubet abandonaron por problemas eléctricos que surgieron tras pasar por manchas grandes de agua. A Elfyn Evans le pasó lo mismo, pero logró continuar para concluir en cuarta plaza, más de cinco minutos y medio detrás del líder.
Dani Sordo completó el orden entre los vehículos Rally1, en tanto que Adrien Fourmaux pasó a la cabeza de la clase WRC2, luego de un problema mecánico en el vehículo de Sami Pajari.