El emblemático GP de Singapur dejó a Sebastian Vettel con mayor desventaja en el Mundial de F1 ante Lewis Hamilton, en un día en el que el alemán defendió la estrategia “agresiva” que ejerció Ferrari durante la justa.
En la primera vuelta, el integrante de Ferrari logró pasar a Max Verstappen, asegurando el segundo sitio –tras arrancar tercero– antes de que el auto insignia saliera por el incidente de los pilotos de Force India; al reiniciar, persiguió al inglés antes de detenerse en la 14° vuelta a cambiar neumáticos.
La estrategia constó en llamar a su piloto a los fosos antes de que lo hiciera el equipo alemán; sin embargo, no funcionó debido a que salió detrás de Sergio Pérez –quien aún no se detenía–, lo que le impidió obtener la ventaja necesaria para quedar adelante del escudero de Mercedes y, además, le hizo perder el segundo lugar contra Verstappen.
Por si fuera poco, el equipo le calzó neumáticos ultrasuaves, mientras sus rivales más cercanos colocaron llantas suaves. A través de la radiocomunicación se mostró escéptico porque tendría que terminar la carrera con ellos, por lo que tuvo que ir a un paso menor al del puntero y terminó a casi 40 segundos de Hamilton; sin embargo, respaldó públicamente las decisiones de sus estrategas.
“Siempre voy a defender al equipo”, dijo Vettel cuando se le cuestionó, en la conferencia de prensa posterior al GP. “La decisión que tomamos en la carrera fue tratar de ser agresivos, si funciona entonces está bien. Hoy no funcionó por muy poco, por lo que tenemos que revisarlo”.
«Fuimos agresivos al intentar salir adelante, tomando en cuenta de que tenemos que ir a través del tránsito, lo cual al final también nos perjudicó para perder el segundo lugar. Si no funciona, siempre es fácil criticar, pero siempre defenderé lo que hicimos».
Explicando que es complicado estar al tanto de todo cuando se está dentro del auto porque no se sabe exactamente en dónde van a salir, Vettel enfatizó en que la falla se dio en gran parte por la elección de neumáticos para las 47 vueltas restantes.
Una vez que Hamilton estableció el ritmo de la carrera, tuvo que hacer hasta lo imposible para poder terminar con los neumáticos que tenían 46 giros de vida, aunque también le ayudó el que Valtteri Bottas detuviera a Kimi Raikkonen y a Daniel Ricciardo, quienes terminaron quinto y sexto respectivamente.
Vettel también se sorprendió al ver que terminaron la carrera con esas llantas y que Bottas no lo pudo alcanzar, pese a la desventaja de dos segundos por vuelta registrada en el final, ya que al parecer el finlandés estaba batallando más que el alemán.
«Como ayer (sábado), probablemente no (estuvimos) donde la velocidad de nuestro auto pertenece, así que a eso es a lo que me refiero al decir que no obtuvimos todo de nosotros mismos», reconoció.
Lewis Hamilton cruzó la línea de meta y se coronó en el lugar más alto del podio en Singapur, por lo que se colocó 40 unidades arriba de Vettel, en tanto que Mercedes se encuentra con 27 puntos de ventaja sobre Ferrari.