El limitante del desempeño siempre ha sido, y será, la pista; en el caso del autódromo capitalino sus configuraciones han sido numerosas, por lo que nuestro HISTORIADOR EN JEFE recuerda las más importantes
El autódromo de la Ciudad Deportiva de la Magdalena Mixiuhca fue inaugurado el 20 de diciembre de 1959 con una carrera ganada por Pedro Rodríguez, seguido por Moisés Solana y Ricardo Rodríguez, los tres grandes originales de nuestro automovilismo y los tres primeros volantes de F1 que dio México. Tras la muerte de Ricardo el autódromo empezó a ser llamado informalmente Autódromo Ricardo Rodríguez, aunque fue hasta noviembre 10 de 1970, días después del IX Gran Premio, que fue nombrado oficialmente como tal.
Pedro murió en 1971 y el DG de Promoción Deportiva del DDF, Prof. Carlos Jalife Elías, logró que el Presidente Luis Echeverría autorizara el cambio del nombre a Autódromo Hermanos Pedro y Ricardo Rodríguez; en el segundo aniversario luctuoso de Pedro, el 11 de julio de 1973, se firmó una instrucción para tal efecto. Desde entonces, la catedral del deporte motor mexicano lleva el nombre de nuestros dos pilotos más grandes.
La configuración principal iniciaba en la recta de fosos y su primera curva era la Espiral, de radio descendente, seguida por la recta trasera que desembocaba en la Ese del Lago ( o Curva Presidencial); luego venía otra recta que llevaba a la Horquilla, desde donde se emprendía el regreso a la meta a través de las Eses, la recta del óvalo y la famosa Peraltada con su inclinación de 32 grados (otros citan 23°).
Instigado por los hermanos Rodríguez, grandes aficionados a las carreras de óvalo estadounidense como las de Indy y NASCAR, el óvalo contempla el uso de la Peraltada como primera curva y de la Curva Plana como última incluyendo la entrada a los fosos, de los que se sale justo en la Peraltada. El óvalo, aunque es corto, no tiene tribunas con vista total, menos después de la construcción del Foro permanente en 1997.
Originalmente un circuito aparte, contaba con sus propios fosos (los pits nacionales en la recta rumbo
a la Horquilla, donde se instalaba la meta del trazo)
e iba del Recorte de 4K a la Horquilla y de regreso usando la Ese del Lago junto a la cual estaba la cabaña presidencial donde el presidente Adolfo López Mateos (1958-64) acostumbraba ver las carreras. Esta zona se llama la zona del Estadio.
Era el circuito más popular para los promotores porque evitaba la curva más lenta del trazo grande (la Horquilla, que era también la frenada más dura) y recortaba el tiempo de vuelta para que el público viera más veces a los autos. También era preferido por los pilotos menos hábiles pues les quitaba el trazo técnico de la Ese del Lago al inicio de las Eses. Fue usado por la CART en sus visitas a México en 1980 y 1981.
Este es un circuito que estaba planeado para permitir usar al mismo tiempo la zona principal con los fosos y la zona del Estadio. Fue planeado, se pavimentó y dado el poco uso del autódromo nunca se necesitó. El recorte iba de 3⁄4 de la recta principal hacia la tercera Ese por dentro de la ciudad deportiva, con un par de curvas. Permanece en espera de ser reclamado por algún promotor visionario.
Otro circuito que nunca tuvo necesidad de ser usado. Evitaba toda la Horquilla con un recorte a la mitad de la recta entre esta y la Ese del Lago, casi frente a los fosos nacionales y usaba las curvas que bordeaban la parte sur del espejo de agua. Cuando se planeó la remodelación de 1986, este circuito fue la inspiración del nuevo circuito de gran premio que se usaría en el GPMX2.0.
Este fue el proyecto planeado para regresar el GP de México en 1972. Involucraba continuar la recta trasera unos 125 metros y regresarla con una horquilla amplia en ese punto para concretar con las Eses desde su inicio. Eliminaba la Ese del Lago (y el propio lago) y la curva a la izquierda después de la Horquilla que marcaba el inicio de las Eses, también llamada la Ele por su forma. (Ver páginas 70-71).
La remodelación de 1986 reemplazó la Espiral con la Ese nombrada en honor a Moisés Solana y cortó a la mitad la recta rumbo a la Horquilla para evitar esa curva y regresar con una derecha más en escuadra a tomar el inicio de la Eses. También redujo el peralte de la Peraltada a 9 grados y amplió la entrada a los fosos al quitar la antigua torre de control y pasarla junto al túnel de la recta.
Al remodelar la pista para la F1 se conservaron la Espiral y la Horquilla, por lo que en ciertas ocasiones se usaban pues se prestaban a combinaciones del nuevo trazo con el antiguo, lo que dio más variación
a los campeonatos. Pero en 1998 el director de deporte del DF, Carlos Albert, remodeló la ciudad deportiva y colocó un skatodromo y una pista de patinaje en la Espiral y cortó el trazo histórico original.
Aunque se hubiera podido usar desde 1959, este circuito se convirtió
en favorito de las categorías vintage pues no requería el uso de los fosos, que se instalaban en la recta al aire libre: usaba al curva plana y presentaba todo un reto de maneo. Pero en 1999 se perdió la porción de la Horquilla cuando la tribuna “provisional” para la misa masiva del Papa JPII cortó la zona. Luego, un delegado se apropió de la Horquilla para volverla vivero.
La construcción de el Foro permanente en 1997 volvió ciega la Curva peraltada, por lo que se experimentó con trazados que usaban el corte a
la mitad de la tribuna para sacar por ahí un trazo que iniciaba en la mitad de la recta del óvalo. El trazo tenía curvas al gusto y podía usarse tanto en los circuitos corridos en sentido del reloj como en los de sentido inverso: Su versión de tres curvas internas en el Foro fue el más largo del AHR.
La antigua curva llamada recorte de Gran Premio fue retocada en la remodelación de 2002 y se volvió más amplia y en escuadra y se nombró en honor al otro piloto mexicano que había corrido en Fórmula Uno, Héctor Alonso Rebaque, en septiembre de 2002. Contemplaba el uso
de la peraltada y era, en esencia el retrazado del circuito VIII con la modificación que le añadía 7 metros.
Tras la remodelación de 2002 se usó un trazo por el interior del Foro
que contemplaba dos curvas de 90 grados, una a la mitad de la recta del óvalo y otra a mitad del Foro para enfocar la pista hacia la salida a media Peraltada. Así se aprovechaban 25,000 asientos del Foro y se evitaba la peraltada ciega. Este trazo sólo podía usarse fuera de la temporada
de béisbol.
Para las carreras de NASCAR Busch (luego Nationwide) en México, el recorte de 4K era muy brusco por lo que se abrió un trazo más amplio en esa misma frenada y fue llamado el recorte de NASCAR que añadía 53 metros al circuito. Pero también se usaron una o dos chicanas –una en la recta principal y otra en la recta del óvalo, en la entrada del Foro– para frenar los autos stock.
Una variación al Circuito del recorte Rebaque, con una chicana en la recta del óvalo para frenar a los autos antes de la Peraltada. Pronto fue más popular que el circuito del Foro porque no implicaba un gran trabajo
ni en recursos humanos ni en materiales. La chicana tenía distintas configuraciones dependiendo de los promotores de la serie que la usara, siendo más amplia mientras más lentos eran los autos.
Como la chicana en la recta del óvalo no era suficiente disuasión para tomar la Peraltada, se inventó hacer una segunda chicana en la curva, unos 50 metros más allá de su inicio. Esta chicana era formada con llantas y obligaba a los autos a iniciar en primera velocidad la Peraltada.
Hay otras dos docenas de configuraciones usadas en algún momento de la historia del AHR y, sin duda, la reconstrucción de 2015 traerá nuevos trazos para mantener vivo y vigente al Autódromo Hermanos Rodríguez.
