El WRC regresa a Chile por primera vez desde 2019 y con la posibilidad de que Kalle Rovanperä asegure su segundo título mundial.
El finlandés tiene ventaja de 33 puntos sobre su coequipero en Toyota GAZOO Racing, Elfyn Evans, con tres fechas restantes en el torneo.
Un resultado entre los ocho primeros por parte del galés extendería la batalla hasta la ronda siguiente, pero si Rovanperä sale con ventaja de 61 – que equivaldría a un triunfo con las cinco unidades disponibles en la Etapa de Poder más un abandono de Elfyn – la corona quedaría finiquitada este mismo fin de semana.
«La última vez que estuvimos ahí, conducía un coche de Rally2 y pasamos un buen fin de semana», recordó Rovanperä. «Pero creo que después de cuatro años y con muchas etapas nuevas, de todos modos se sentirá más como un rally nuevo y será un evento desafiante para todos».
«Las carreteras son bonitas, pero las condiciones pueden ser muy complicadas y el agarre puede cambiar mucho. Aun así, estoy deseando que llegue y espero que pueda ser un buen rally para nosotros».
Mientras tanto, Toyota se hará de su tercera corona consecutiva de constructores si logra superar a Hyundai por al menos 13 puntos. Esa tarea está en manos de Rovanperä, Evans y Takamoto Katsuta.
Thierry Neuville es el otro piloto que sigue en la pelea, aunque su déficit es 66 unidades. Junto al belga en una alineación de tres i20 N se encuentran los finlandeses Esapekka Lappi y Teemu Suninen.
Por su parte, Ott Tänak es el único piloto que ganó una prueba del WRC en Chile y lo hizo al volante de un Yaris. El estonio ahora conduce para M-Sport Ford, que cuenta con Pumas para él, Pierre-Louis Loubet y el debutante en el Rally1, Grégoire Munster.
El local Albert Heller, ganador de su clase en el nivel WRC2, ha alquilado un cuarto auto para su prueba de casa.
Concepción, la segunda ciudad más grande de Chile, vuelve a ser el centro neurálgico del rally, ya que ahí se situará el parque de asistencia, pero es en el corazón de Los Ángeles, capital de la provincia de Biobío, donde comienzan las celebraciones. Se espera una gran afluencia de público en la ceremonia de inicio del jueves por la tarde, que dará comienzo a las 19.00 horas (Tiempo Local).
Gran parte del recorrido se modificó para incluir 16 tramos especiales repartidos en tres días con una distancia total de competición de 320.98 km. Se desarrollan principalmente en pistas forestales tierra adentro desde el Océano Pacífico y cerca del imponente Río Biobío, el segundo río más grande de la nación.
El itinerario del viernes suma 112.86 km de competición y tres tramos de tierra, cada uno de ellos pasado dos veces por la asistencia en Concepción. A la postre, Pulpería (19.77 km) y Rere (13.34 km) abren la jornada antes de que Río Claro, la especial más larga del día con 23.32 km de longitud, complete ambos bucles.
Para el sábado se abordará la jornada más larga del rally: Chivilingo (27,19 km) es el primero, seguido de Río Lía (21.09 km), el único tramo que se mantiene sin cambios desde la edición 2019. María de las Cruces (28.72 km) y completa el bucle, que se repite una vez más después del servicio.
El final del domingo cuenta con tramos en Las Pataguas (13.20 km) y El Poñen (13.86 km), cada uno disputado dos veces y separados por una breve parada de asistencia de 15 minutos. La segunda pasada de este último tramo será la Etapa de Poder, en el que están en juego puntos de bonificación que le podrían dar a Rovanperä el título.