Sergio Pérez no es un piloto «imprudente», insiste su equipo de F1, Sahara Force India, luego de que Dani Kvyat lo acusara de un movimiento «desesperado» en el Gran Premio de Mónaco.

Pérez rodaba con neumáticos nuevos en las etapas finales cuando chocó con Kvyat al querer zambullirse por dentro en un intento por tomar el noveno puesto.

El incidente dejó a Kvyat fuera de la carrera y Pérez cerró la carrera en el puesto 13.

Kvyat estaba furioso y los comisarios entregaron a Pérez una penalización de 10 segundos, que no le costó nada, ya que era el último de los finalistas.

Aunque Force India se sintió decepcionado de que su racha de puntos terminara, al final se sintió satisfecho con el trabajo de Pérez en la pista.

«Él empuja duro, pero no es imprudente», explicó el jefe de operaciones de Force India, Otmar Szafnauer. «Él alcanzó a (Lance) Stroll, (Jolyon) Palmer, (Stoffel) Vandoorne, e intentó rebasar a Kvyat, parte de lo que todo piloto que quiere avanzar haría”, afirmó.