Después de un controversial gran premio en Barcelona en donde Sergio Pérez fue obligado a cederle el lugar a su coequipero, Max Verstappen, “Checo” expresó su descontento con la situación y a los pocos días arrasó en el Gran Premio de Mónaco en prácticas, clasificación e incluso ganando la carrera.

A los pocos días se anunció su extensión de contrato hasta finales de 2024 con Red Bull y el equipo, por voz de Helmut Marko, declaró que Pierre Gasly (quien era contendiente a tomar su lugar) permanecerá en AlphaTauri ya que no tenía una oferta mejor, y su extensión formal con al equipo B de la firma e bebidas energéticas fue filtrada en Canadá.

Sergio es conocido por ser bastante bueno en los circuitos callejeros y Azerbaiyán parecía igual de prometedor que Mónaco, pero el resultado fue muy diferente al esperado. Verstappen logró rebasarlo para ganar nuevamente, aplicando lo declarado después del GP de Barcelona: «incluso si no hubieran existido órdenes de equipo, lo habría rebasado».

Las cosas se pusieron aún más extrañas el momento en que llegó el Gran Premio de Canadá, el cual se llevó a cabo en la pista de Montreal. Poco después de que Pérez se estuviera “rebelando”, por así decirlo, contra su equipo, su monoplaza mágicamente comenzó a fallar todo el fin de semana.

También debemos recordar las alegatas que hizo Jos Verstappen (papá de Max) en Mónaco. Este expresaba su enojo después de que “Checo” ganó el gran premio declarando «al líder del campeonato, Max, no le ayudó en ese sentido la estrategia elegida. Se volcó completamente a favor de ‘Checo’».

Todo esto podría ser más una teoría de conspiración que un hecho, sobre todo considerando que el piloto tapatío nunca ha tenido mucho éxito en el GP de Canadá, apenas un podio y nunca calificó adelante de la cuarta fila. Luego, Max habló con su padre respecto a sus declaraciones y defendió la carrera de Sergio. Parece que ahí no hay tema.

Pero, ¿será que el equipo apoya más a Verstappen que a Pérez? No se sabe a ciencia cierta, pero algo que nos ha quedado claro en equipos como Red Bull y Mercedes, es que en ellos el piloto #2 sí existe. Y esta fue precisamente la función para la que Sergio fue contratado: defender la posición de Max y ayudarlo a ganar.

Sin embargo, eso fue antes de que el mexicano se colocara como contundente a campeón siendo segundo general, sólo por detrás de su coequipero, Sergio ya supera a Charles Leclerc como el rival más fuerte del holandés por el título de 2022.

La pregunta aquí no es si “Checo” Pérez puede ganar el campeonato o no. La verdadera pregunta es: ¿Lo dejarán ganar o tendrá que permanecer como piloto #2 y ayudar a su compañero a retener el campeonato?

A girl talks F1                 Columna por   MANENA MANAUTOU