Uno de los lanzamientos estrella en el Salón de Ginebra fue sin duda el Lamborghini Centenario, un modelo de producción limitada a tan sólo 40 ejemplares, 20 coupé y 20 convertibles. Tiene un precio de 1.75 millones de euros (más impuestos), aunque de acuerdo con la marca, ya están vendidos todos.
Este modelo agresivo y muy estilizado monta el motor V12 atmosférico más potente en la historia de la marca, con 770 caballos. Esta cifra le permite conseguir una aceleración de 0 a 100 kph en apenas 2.8 segundos, así como un 0 a 300 en 23.5 segundos, hasta alcanzar una máxima que de acuerdo con Lamborghini es de “más de 350 kph”. Este motor es básicamente el mismo que llevan modelos como Aventador y Veneno, pero retocado para poder girar hasta las 8,600 rpm (en los primeros gira a 8,350 rpm).
Una de sus principales novedades es que monta un sistema de dirección en las 4 ruedas, similar al que estrenara Porsche el año pasado en el 911. Con esto se mejora la agilidad a baja velocidad y se reduce el diámetro de giro, pues las ruedas traseras giran en sentido opuesto a las delanteras. A velocidad elevada giran en la misma dirección que las delanteras para orecer un manejo más preciso.
Por su parte la suspensión equipa amortiguadores magnetorreológicos de dureza variable, que se ajustan dependiendo del modo de conducción que se elija: Strada, Sport y Corsa (literalmente, Calle, Deportivo y Pista). Los frenos son de compuesto carbonocerámico y se anuncia una distancia de frenado de 100 kph a cero en tan solo 30 metros.
Su chasis está fabricado enteramente en fibra de carbono, lo mismo que la carrocería. Mide 4.92 metros de largo, casi 2 de ancho, y apenas 1.14 de altura. La marca declara un peso en seco de 1,520 kg. Lleva llantas Pirelli PZero de 20 pulgadas en el eje delantero y 21 en el posterior, con rines de sistema de tuerca central en lugar de los birlos convencionales.
En el interior todo está recubierto de piel, Alcantara y fibra de carbono, con asientos tipo buquet. Destaca en la consola central una pantalla táctil de 26 cm desde la que se puede controlar el sistema multimedia que ofrece conectividad a Apple CarPlay. Ahí se puede navegar por internet y hacer uso de telemetría para medir diferentes parámetros de manejo en pista. En la cajuela hay espacio suficiente para guardar un par de cascos, y se pueden montar opcionalmente un par de cámaras a bordo para grabar los recorridos, o “hot laps”.
El Centenario fue desarrollado para conmemorar los cien años del nacimiento de Ferruccio Lamborghini, fundador de la marca.
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