Independiente a que logró su tercer podio del año en el Gran Premio ruso de F1, Carlos Sainz II rescata el aumento de confianza dentro de Ferrari.
El español finalizó en tercer lugar el domingo pasado en Sochi, lo que junto con su segundo sitio en Mónaco, el tercero en Hungría y el anotarse puntos en trece de las quince carreras disputadas, lo tienen sexto en la clasificación general.
A pesar de que admitió con anterioridad momentos de desconfianza, en especial desde el regreso de las vacaciones de verano cuando protagonizó accidentes en los ensayos en Monza y Zandvoort, Sainz asegura que su desempeño a nivel personal sigue mejorando.
«Es un momento bueno, por supuesto, ha sido un año desafiante, obviamente, cambiando de equipo y adaptándonos a un auto completamente nuevo con un equipo completamente nuevo, pero en lo que va de año, obviamente, tres podios no están nada mal», afirmó.
«Este fin de semana, creo, fue probablemente mi mejor fin de semana como piloto de Ferrari. Me las arreglé para hacer una vuelta muy fuerte en la calificación, un comienzo bueno, una gestión buena del ritmo en la carrera, así que sí, espero poder seguir mejorando».
«Aún hay muchas cosas en las que trabajar, principalmente en la gestión de neumáticos y obviamente un poco la velocidad máxima para asegurarnos de que no seamos tan vulnerables cuando estamos liderando un Gran Premio porque quiero asegurarme de que la próxima vez que tenga la oportunidad de liderar un Gran Premio, no esté sufriendo tanto con los neumáticos delanteros».
«No somos tan vulnerables en las rectas y como Ferrari, tenemos que seguir trabajando para ser el equipo que queremos ser, es decir, ganar carreras. Hoy tuvimos la oportunidad de liderar pero no logramos ganar la carrera, así que la próxima vez realmente quiero disfrutarla e intentar lograrlo».
Sainz, quien aventaja por 8.5 puntos a su coequipero Charles Leclerc, no sólo se destacó por su segunda posición de calificación en condiciones cambiantes, sino por rebasar a Lando Norris para liderar los doce primeros giros de la jornada dominical, hasta que el granulado de sus neumáticos le impidieron resistir el ataque del británico.
El tránsito le impidió seguir en la lucha por el liderato y después Sergio Pérez lo rebasó en la parte final, tomó ventaja con la aparición de la lluvia al ser uno de los primeros en cambiar a los neumáticos intermedios.
Pese al resultado general, e independiente a que todavía debe su cambio al cuarto motor del campeonato, Sainz sigue enfocado en combatir las áreas de debilidad de su modelo SF21.
«En algún punto realmente pensé que el podio no iba a pasar, pero me encontré en tercero frente a Pérez a 10 vueltas del final y dije ‘Está bien, ahora es una oportunidad buena para mantener esta posición'», compartió.
«Encontré mi buen ritmo con el duro, encontré sensaciones buenas pero de repente vi venir la lluvia. Estaba empezando a llover en las curvas 5 y 7 y todos los que estábamos en duras estábamos luchando enormemente para mantener el auto en la pista mientras que la gente en medios, parecían tener un poco más de agarre, parecían estar con un blando neumático logrando mantener el auto en la pista».
«En algún momento estaba considerando entrar en fosos por un neumático blando, sólo para llegar al final y al final decidimos ir a intermedios para las cuatro últimas vueltas, funcionó a la perfección y terminamos terceros, así que decisiones buenas, gestión buena, sólo un poco más de obstáculos de los que esperaba después de liderar en la curva 2».