La polémica de la quema de aceite ha seguido en la agenda, pues algunos equipos como Renault han llegado a los límites de las regulaciones.
Todo inició justo antes de que empezara la temporada, cuando Red Bull cuestionó el comportamiento de la FIA ante la quema de aceite como combustible. En ese tiempo Red Bull sospechaba que Mercedes había estado explotando esta área de manera inteligente.
El tema volvió a salir a la luz en la víspera del GP de Azerbaiyán, cuando la FIA emitió una nueva directiva en la que dejaba claro que ningún equipo podía usar ningún tipo de compuesto químico en su aceite para ayudar a la combustión.
Este último movimiento, se cuenta que llegó tras algunas preguntas que Mercedes hizo sobre el tema, con referencia a que Ferrari podía haber estado quemando aceite para mejorar su rendimiento.
Aunque Ferrari negó cualquier acto en contra del reglamento, Renault está seguro de que la FIA no habría ido tan lejos como para emitir una directiva técnica nueva si no hubiera tenido sospechas de que los equipos estaban haciendo algo mal.
