El equipo de Red Bull está seguro de que tendrá más penalizaciones antes de que termine la temporada 2017 de Fórmula 1.
Tanto Daniel Ricciardo como Max Verstappen cayeron en la parrilla del Gran Premio de Italia el pasado fin de semana, cuando Red Bull cambió motores para asegurarse de que no existieran problemas en Singapur, donde espera ser fuerte.
Sin embargo, el director del equipo, Christian Horner, calcula que no habrá suficiente millaje en los nuevos motores para completar los siete eventos restantes sin necesidad de implementar nuevos componentes, lo cual provocaría sanciones.
«Estamos seguro de que incurriremos en nuevas sanciones», dijo Horner.
«Espero que tengamos el plan estratégico para resolverlo, pero es probable que lleguemos al final del año con otro castigo».