FOTO: Racing Point

Racing Point calificó la protesta que Renault presentó a la FIA como «mal concebida y pobremente informada» y confía en la ratificación de la legalidad del modelo RP20.

Ayer domingo, después de la segunda fecha del campeonato 2020, la marca francesa presentó una reclamación, a fin de verificar la legalidad de los coches de Sergio Pérez y Lance Stroll.

Su protesta se basa en que los ductos de freno delanteros y traseros de los monoplazas podrían ser una copia del sistema que se utilizó en el Mercedes W10 que compitió en 2019.

La Federación admitió la solicitud, ordenó confiscar las piezas de los coches de Racing Point y a Mercedes le pidió entregar sus elementos en cuestión.

El equipo de Silverstone emitió un comunicado breve hoy lunes, en el que defienden sus acciones y aseguran que no se han violado las reglas deportivas de la F1.

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«BWT Racing Point F1 Team está extremadamente decepcionado al ver sus resultados en el Gran Premio de Estiria cuestionados por lo que considera una protesta mal concebida y pobremente informada».

«Cualquier y toda sugerencia de irregularidades se rechaza firmemente y el equipo tomará todas las medidas necesarias para garantizar la aplicación correcta de las reglas a los hechos».

«Antes del inicio de la temporada, el equipo cooperó completamente con la FIA y abordó satisfactoriamente todas las preguntas sobre los orígenes del diseño del RP20».

«El equipo confía en que la protesta será desestimada una vez que haya presentado su respuesta».

La protesta utiliza como argumento el Apéndice 6 del Reglamento Deportivo que indica que, en caso de que un tercero diseñe «Partes Listadas», éste no puede ser un competidor o una parte que directa o indirectamente las prepare para cualquier competidor.

Antes del inicio planeado de la temporada, Andrew Green, Director Técnico de Racing Point, insistió en que el RP20 recibió el aval de la FIA, luego de que representantes del organismo visitaran su fábrica, revisaran el vehículo y compararan datos con el Mercedes de 2019.

«Pueden gritar y hablar tanto como quieran, pero creo que lo que realmente están gritando y hablando es el hecho de que se han perdido un truco. Y eso es lo que les molesta», declaró Green en abril.

A reserva del resultado de la protesta, Racing Point es cuarto en el Campeonato de Constructores de F1 después de dos rondas con 22 puntos, y Renault ocupa la sexta plaza con ocho unidades.