Porsche amplia de manera importante su capacidad de manufactura con la puesta en marcha de una fábrica de motores V8. Estas instalaciones comenzaron a edificarse en 2014 y para ello se ha invertido un estimado de 80 millones de euros. Actualmente trabajan ahí 400 empleados capaces de fabricar 200 motores cada día.
De acuerdo con directivos de la marca, el objetivo es que la nueva planta no sólo fabrique los V8 del Panamera nuevo, sino que se convierta en el único punto de ensamble para los propulsores de ocho cilindros que existen en todas las marcas de grupo. Cada 3.5 minutos comienza el ensamblaje de un nuevo motor. Un total de 95 carros de piezas transportan los motores a lo largo de la línea, diseñada en forma de U y con una longitud de 432 metros. Un motor de ocho cilindros es producido en 6.2 horas y en 110 ciclos de trabajo, de los cuales 71 son en las áreas de manufactura.
Las nuevas instalaciones tienen una superficie total de 10,000 metros cuadrados, y de acuerdo con la marca se han logrado avances sin precedentes en materia de cuidado al medioambiente. Cuarenta criterios de sostenibilidad del edificio fueron evaluados. Entre otras cosas, un sistema fotovoltaico instalado en el techo genera anualmente hasta 242,500 kWh de energía eléctrica. Esto representa un ahorro de 105 toneladas métricas de dióxido de carbono, en comparación con lo que emitiría un sistema de generación eléctrica convencional. Además, grandes secciones del techo han sido recubiertas con jardines de plantas, lo que contribuye a mejorar la calidad del aire.
Se estima que de dentro de algunos años, esta planta de motores sea ampliada para fabricar un propulsor eléctrico que dará vida a un deportivo que no llevará motor de combustión interna.