El constructor inglés ha hecho público mediante un comunicado, que confía plenamente en que el español pueda conducir nuevamente el MP4-30 este fin de semana durante el GP de Malasia, pues el proceso de recuperación del piloto ha sido riguroso y se ha enfocado en no exponer al asturiano al menor riesgo.
Además de poner énfasis en que en todo momento su restablecimiento es monitoreada por los mejores científicos deportivos, McLaren también da cuenta que Fernando ya trabajó en el simulador, el cuál fue actualizado con las evoluciones más recientes del auto para que el español esté al día.
Alonso estuvo repasando también el accidente con sus ingenieros, pues están buscando obtener un análisis detallado del mismo, como parte de la investigación conjunta que se lleva a cabo por parte del equipo y la FIA.
Fernando recordó que la dirección del auto se puso muy dura momentos antes del accidente, por lo que la escudería inglesa ha adicionado un sensor para incrementar la información que reciban, pues no encontraron nada anormal tanto en la telemetría obtenida del auto como en el reconstrucción de laboratorio que se llevó a cabo después del choque.
El próximo jueves 26 de marzo, la FIA le hará una evaluación médica a Fernando Alonso, con la cual se decidirá si el órgano rector de la competencia le da su aprobación para poder pilotar el MP4-30.
Ese mismo día Valtteri Bottas será igualmente evaluado buscando el aval de los doctores para poder subir al FW37 en esa misma justa. El finlandés también se siente confiado y en condiciones de aprobar su revisión para afrontar la dura carrera malaya.