Marussia hizo un trato que fue definitivo en 2013: contrató al piloto protegido por Ferrari, Jules Bianchi, para su escuadra y tras usarlo brillantemente para lograr el décimo sitio de constructores –por primera vez en su historia no fue último pues cuando había batido a Hispania estos se retiraron– lograron firmar con Ferrari para que les proporcionara motor y caja a partir de 2014. Este golpe maestro les simplificó la estructura del auto y les permitió dedicarse más a desarrollar la aerodinámica y otras cuestiones con los recursos que deja libre no trabajar la combinación de propulsión y transmisión.
Buen punto que podría hacerlos dar un salto cuantitativo en 2014.
AUTO
El MR03 es, siguiendo la pauta marcada por Ferrari, un auto más esbelto con pontones chicos, bien perfilados y un paquete de enfriamiento de motor y sistemas auxiliares de generación de potencia muy logrado. Y en la parte posterior, con el acomodo de motor y caja viene un pequeño problema que es el uso de la suspensión trasera de varillas de jale, igual que Ferrari, la cual contrasta con la delantera de varillas de empuje, algo poco usual, pero que se ha logrado sin mucha demora. Pero el paquete trasero no proporciona puntos de montaje para el alerón y Marussia ha optado por un pilar central estilo RBR –curvo a la altura del escape– con los limitadores verticales apoyados en el piso plano para ofrecer refuerzo, y un asiento de mono justo arriba del escape como método de recuperar algo del agarre perdido atrás al no haber alerón de travesaño.
Sin embargo, el carenado del motor se nota simple, y ligero, muy cuadrado, y ese mismo aspecto tiene la nariz, que es muy cuadrada en la parte superior, lo cual quizás provoque problemas en el flujo del aire hacia atrás. En sí, la trompa es parecida a los modelos 2013 con panel de vanidad, sin cambios abruptos en la superficie, pero sin contornos que acomoden el aire. El alerón delantero está bien detallado y es mucho más moderno en la zona de sus limitadores verticales, algo nuevo para ellos.
PILOTOS
El equipo de Banbury repite su combinación de 2013, con Jules Bianchi (#17) y Max Chilton (#4) al volante. Jules fue probablemente el mejor novato de 2013 por sus actuaciones, aunque nunca logró los puntos que marcaron sus antiguos coequiperos de ART en F3 (Esteban y Valtteri), ni logró marcar un tanto que sería el primero de la historia, para la escuadra rusa con base británica.
Bianchi debería estar destinado a cosas mayores, pero los asientos mejores son pocos y no están disponibles sin aporte monetario; Ferrari lo mantiene corriendo en la máxima categoría, pero necesita hacer algo espectacular para mostrar sus cualidades al mundo. Chilton padeció al inicio del año, pero al final pudo pelear un poco, aunque es obvio que repite por su billetera y no por sus manos. En su descargo hay que apuntar que Max fue el primer novato en acabar todas las carreras de una campaña, frecuentemente a varios giros del vencedor, pero acumulando kilometraje valioso. Para ellos, 2014 debe ser mejor, ya saben quién manda quién obedece, no hay disensión y tienen un año de experiencia, además de un auto mucho mejor que el que usaron en su debut. No deberían ir sino hacia arriba.
PROGNOSIS
Marussia tiene que apostarle a la confiabilidad en 2014 para tratar de romper su marca sin puntos en su tercer año en la Fórmula Uno –más otros dos como Virgin– y el paquete confiable de Ferrari podría hacerlos lograr la hazaña.
En Jerez no mostraron mucho, pero fueron confiables, sin grandes problemas como los que enfrentaron muchos de sus rivales. El dinero de los rusos puede ser grande, pero la paciencia no y necesitan empezar a producir antes de que los euroasiáticos se saturen y dejen de apoyarlos.
“No tenemos más que cosas buenas que decir acerca de nuestra nueva relación con la Scudería Ferrari” John Booth, Director de Marussia.
