Por Natalia Castillo • revistaactual.com.mx
La jugadora rusa de tenis, María Yurievna Sharapova, quien ha ganado los cuatro abiertos del Grand Slam y logró mantenerse durante años entre las 10 mejores de la clasificación de la WTA no pasa por el mejor momento de su carrera, después de dar positivo en un control antidopaje, por consumir una sustancia prohibida recientemente, llamada meldonium, la cual tomaba para aliviar problemas respiratorios desde hace años.
Recordar los momentos gloriosos de esta atleta es hablar de la relación que llevaba con el fabricante de automóviles alemán, Porsche, pues en 2013 se convirtió en la embajadora oficial de la marca.
Sharapova es una gran fanática de los coches y hasta tuvo la oportunidad de lanzar un diseño propio, pues Porsche sacó el Panamera GTS “By María Sharapova”, en la línea Exclusive; el coche 4.8 litros V8 atmosférico de 440 caballos de fuerza lucía una carrocería blanco brillante, faros ahumados y llantas enormes de 20 pulgadas, como distintivo de la tenista llevaba su nombre y tenía interiores de cuero en tonos marrón y crema.
En muchos de los torneos que conquistó alrededor del mundo se le premiaba con autos y en 2013, tras ganar el torneo de Stuttgart se llevó un Porsche 911 4S, el cual decidió obsequiarlo a su entonces amor, el búlgaro Grigor Dimitrov. En diversas ocasiones disfrutó experiencias inolvidables con el piloto de Fórmula Uno Mark Webber, quien la llevó por los alrededores de Stuttgart y a ceremonias relativas al Abierto de Wimbledon, en Londres, a bordo de un Porsche 918 Spyder.
Después de tres años siendo la embajadora de Porsche, la marca decidió retirarle el patrocinio tras la suspensión de la tenista. El futuro deportivo de María Sharapova está por definirse, aunque ella sigue disfrutando de su pasión automovilística.
