Chilton se dirigió a los EE.UU. después de dejar la Fórmula 1 al final de la temporada 2014, manejando al mismo tiempo un Nissan LMP1 con Indy Lights.
Despues consiguió un asiento en IndyCar en 2016 como el cuarto piloto de Ganassi, junto a los campeones Scott Dixon y Tony Kanaan, y Charlie Kimball.
Al renovar su contrato para el próximo año, Chilton cree que la estabilidad pagará dividendos porque planea construir a partir de su campaña como novato.
«Es sumamente importante tener esa continuidad. Por lo menos tener el mismo ingeniero de equipo, el ingeniero es el que más trabaja contigo y es bueno si continúa esa relación e idealmente, tratar de mantener la tripulación igual. Cuando todo el mundo sabe cómo trabaja el uno con el otro, no tienes que pasar tiempo conociéndolos. Sé por mi experiencia en monoplazas que esto realmente ayuda.
